Me declaro inocente.
Aquella
mañana, casi mediodía, no fue de cerámica, no, fue radiante a pesar de la
lluvia de después. La revivo como un milagro con flores saliendo de las
ventanas, de los balcones, gentes sonrientes apartándose a nuestro paso, coros de
niños cantándonos a José Alfredo Jiménez, “préndeme fuego si quieres que
te olvide”, avestruces sabias mirándonos con envidia, ella en silencio y para
qué diablos necesitaba hablar si sus ojos eran pura elocuencia, si su belleza
era virginal con rayos ondulados saliendo de un rostro que repite en fotos y
más fotos y en cada una está a cual más hermosa, un ser celestial, de otro
mundo, yo hablaba sin parar para que ella no despegase los labios, movía
las manos para apartar el aire, me ahogaba, quería atrapar el
instante como un pintor autodidacta, como un fotógrafo de luces, como un
atrevido dibujante que apenas sabe deslizar trazos por lienzos de aquellas
calles de domingo con poetas en las esquinas y gatos en los tejados. Los niños
seguían cantando, “Haz con mi corazón lo que tú quieras y después, por amor,
declárate inocente”. Después el cielo se rompió, oscureció, parecía
que millones de habitantes entraban por aquella parada de metro, tantos que no
pude despedirme, mojado, torpe, tartamudo, sin saber que más decir,
deshabitado, como caído de un cuarto piso, herido por el rayo de su ausencia
repentina. Han pasado muchos, muchos meses y está en mi cabeza como una foto
fija, como esas estampas en negro que miras con fijeza durante 30 segundos
luego miras al cielo y ahí está, en blanco, la silueta, o sea ella, que no me
olvido de nada y quiero que sepa que no, aquella mañana no fue de cerámica.
6 comments :
Siempre las pierdes en el metro, a no ser que sea la misma.
Hermoso texto.
Un abrazo.
Narrar de esa manera soberbia es un delito con una condena a terminar en el paraíso. No digas que no, te lo advertí.
Esto es muy serio, por favor, no se puede dejar así sin custodia semejante joya e irse a la cama como si nada.
Yo creo que sí le mandas ese texto se toma un metro ..un tren.
Un avión.
Se sube a un bote pero vuelve a tus brazos..Es un escrito tan bello ..tan.sugestivo en imágenes ..tiene una ternura tan enorme aflorando ..siento que es una declaración tan natural e inocente .
Como de otro tiempo ...me encantan los sombreros Si tuviese uno te haría una reverencia Besos de sol
Moony-A media luz la fotografía que acompaña a mi texto pertenece al palacio de Bellas Artes (DF) donde vi actuar a Poveda y a Serrat, tan querido ahí. Cerca hay una parada de metro que, si no me lo he inventado, fue donde ocurrió ese milagro, uno de esos regalos que te da la vida, algo tan sincero, tierno, limpio, intenso.
Por diferentes causas tengo un día muy sensible.
Un beso.
Luz cuando no tenía tiempo lo inventaba, ahora que tampoco lo tengo no sé de dónde sacarlo. Mis disculpas si a veces no puedo visitar tu página. Una cosa, si te vas a la cama a las 4 de la mañana o vivimos en mundos diferentes o tienes desajustado el reloj.
Muchíííííííímas gracias por tus palabras, siempre. Un beso.
eli mendez quizás el tono que le ha dado pueda sugerir un encuentro amoroso. Lo es. Pero de una absoluta pureza, de admiración, de milagro, de descubrir que la vida te sorprende con emociones tan profundas, tan sinceras que… Disculpa, estoy demasiado sensible hoy, la vida real, la de ahora, está siendo intensa. Por fortuna parece qu todo ha ido bien. Besos.
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