Agradecimiento.
...en esta guerra sólo se mata en los arrabales
el centro es ciudad abierta por mutuo acuerdo
entre el bien y el Mal mientras la Ciencia
del alma
calcula cómo calcular lo incalculable
por ejemplo
cuántos deben morir cada día en Etiopía
para que nos salga social
de pronto
la poesía.
(Manuel Vázquez Montalban)
“Siento la pistola bajo la chaqueta. Su peso me da seguridad. Mañana es el día. La dirección así lo ha decidido. No estoy nervioso. Es nuestro enemigo. Debo hacerlo. Seguro que no tendré problemas. No es como nosotros, aunque haya nacido aquí. Es el opresor. Quieren despojarnos de lo que es nuestro, de lo nuestro. No estoy nervioso. Al abuelo lo mataron en la guerra. Mi padre estuvo cinco años en la cárcel. Todo está calculado. Lo haré cuando lleve a su hijo al colegio. En las fotografías tiene cara de perro, de traidor, de extranjero. Quieren robarnos lo que siempre ha sido de este pueblo. No estoy nervioso. Me iré despacio, calle abajo, hasta el coche de J, después cruzamos el puente y ya está. Quince días en casa de M. Será como siempre. No sabrán de donde llegamos. Soy un soldado. Defiendo a mi patria. Es mi enemigo. Debo hacerlo. No estoy nervioso. La dirección me lo ha ordenado. Mañana. El peso de la pistola me da seguridad. No se nota debajo de la chaqueta.”
asesino, na.
. adj. Que asesina.
Evolución del término terrorismo.
Para acceder a una mayor comprensión de la naturaleza del terrorismo, es conveniente un análisis más detallado, de la evolución en el uso del término.
La palabra "terror" proviene del idioma latín terror o terroris, sinónimo de Deimos. En la Antigua Grecia, Ares, Dios de la Guerra, tenía dos hijos: Phobos y Deimos (Miedo y Terror).
Ya Maquiavelo recomendaba que para el Príncipe «es más seguro ser temido que amado».
La palabra «terrorismo» (así como «terrorista» y «aterrorizar») apareció por primera vez en Francia durante la Revolución Francesa entre (1789-1799), cuando el gobierno jacobino encabezado por Robespierre ejecutaba o encarcelaba a los opositores, sin respetar las garantías del debido proceso. El término comenzó a ser utilizado entonces como propaganda contra el gobierno revolucionario, por su accionar en la línea del terrorismo de Estado; el período mismo ha sido conocido como Reinado del Terror (1793-1794).
La expresión terrorismo (proveniente de la palabra francesa del siglo XVIII terrorisme ("bajo el terror") significó entonces el uso calculado de violencia o la amenaza de la misma por parte del Estado contra la población civil, normalmente con el propósito de obtener algún fin político o religioso.
El terror, como arma política, fue retomado en Rusia en la segunda mitad del siglo XIX, entre algunos grupos opositores al régimen zarista. En 1862, el Piotr Zaichnevski redactó el manifiesto titulado Joven Rusia proclamando:
"Hemos estudiado la historia de Occidente y sacado sus lecciones: seremos más consecuentes que los lastimosos revolucionarios franceses de 1848; pero sabremos ir más lejos que los grandes campeones del terror de 1792. No retrocederemos, incluso si para derribar el orden establecido nos hace falta verter tres veces más sangre que los jacobinos franceses."
En su sentido actual, el término fue acuñado extensivamente por la propaganda nazi para hacer referencia a los movimientos de Resistencia de los países ocupados por el ejército alemán y consolidado por las dictaduras latinomericanas de las décadas del 70 y del 80 y los Estados Unidos, en el marco de la Doctrina de la Seguridad Nacional desarrollada desde la Escuela de las Américas.
Un estudio de 2003 realizado por el ejército estadounidense afirma que existen más de 100 definiciones de terrorismo.
Por todos estos factores, muchos especialistas consideran la palabra terrorismo un término que en su uso ha devenido en un concepto meramente propagandístico para descalificar al enemigo más que definir un situación de forma objetiva.
Jean-Luc Godard (París, 3 de diciembre de 1930) es un director de cine franco-suizo. Ha cultivado un cine vanguardista y experimental respecto al montaje considerado clásico que se ha caracterizado por su irreverencia y rebeldía. Es considerado uno de los miembros más influyentes de la nouvelle vague.
Primeros años
Hijo de un médico y de una hija de banqueros suizos, vivió sus primeros años en este país, para trasladarse a París durante su adolescencia, donde más tarde estudiaría etnología en la Sorbona. Es en esta época cuando comenzaría a descubrir su gran pasión por el cine, frecuentando la Cinemateca Francesa y los vídeo clubs parisinios. En 1950 empezó a trabajar como crítico cinematográfico en varias revistas, entre ellas Cahiers du Cinéma, en las que utilizaba el seudónimo de Hans Lucas. En esta publicación coincidiría con la plana mayor de la Nouvelle vague, es decir, con François Truffaut, Eric Rohmer, Claude Chabrol y Jacques Rivette.
Al morir su madre en 1954, se trasladaría de nuevo a Suiza donde trabajó como albañil, hecho que sirvió como argumento a su primer documental, Operation Béton. Al volver a París, mientras seguía trabajando en Cahiers du Cinéma, rodaría los cortometrajes Une femme coquette y Tous Les Garçons S´Apellent Patrick en 1955 y 1957 respectivamente.
La época dorada de la Nouvelle vague
En el verano de 1959 comenzaría el rodaje de su primer largometraje, À bout de souffle sobre un guión de Truffaut y con la colaboración de Claude Chabrol. La película, protagonizada por Jean-Paul Belmondo y Jean Seberg supuso una revolución en la manera de filmar al utilizar técnicas hasta entonces poco ortodoxas, como rodar cámara en mano, utilizar el documental o saltar de un plano a otro. A pesar de no lograr ningún premio en el Festival de Cannes, ganó el Oso de Oro en el Festival de Berlín, así como el Premio Jean Vigo.
En 1960 dirigió su segundo largo, El soldadito, el cual estuvo prohibido en Francia durante tres años. Este film estuvo protagonizado por Anna Karina, actriz con quien se casó un año más tarde y que protagonizaría varios de sus proyectos posteriores.
Durante los siguientes años, Godard colaboró con otros integrantes de la Nouvelle vague como actor, co-director o productor, a la vez que dirigió películas enormemente influyentes que fueron aclamadas por la crítica cinematográfica como Banda aparte o Pierrot el loco. Algunos de los premios que cosechó en esta época fueron el premio especial del jurado y el de la crítica de la Mostra de Venecia por Vivir su vida, su segundo Oso de Oro por Alphaville, y un nuevo premio especial del jurado en la Mostra por La China.
Etapa política
A partir de esta última película rodada en 1967, y después de casarse en segundas nupcias con la actriz Anne Wiazemsky, Godard comenzó a incluir en sus trabajos referencias al maoísmo y al marxismo-leninismo, ideologías entonces en boga entre algunos intelectuales y ciertos sectores estudiantiles que participarían en el Mayo francés poco más tarde.
En esta época creó el colectivo Dziga-vertov junto a otros cineastas como Jean Pierre Gorin y Juliet Bertó, y muchos de sus filmes, que comenzaría a rodar en 16 mm, se nutrirían de influencias del cine de propaganda soviético. En sus propias palabras, eran películas revolucionarias para audiencias revolucionarias.
En mayo del 68 el Festival de Cannes fue suspendido por las interrupciones en las películas que hicieron Godard, Truffaut, Polanski y otros cineastas en apoyo al movimiento estudiantil del Mayo francés. En ese año también dirigió One plus one, más tarde titulado Sympathy for the Devil, un documental que muestra cómo los Rolling Stones grabaron esta famosa canción.
A partir de los 70
A partir de los años 1970 Godard comenzó a experimentar con el formato de vídeo, al mismo tiempo que también dirigiría películas más convencionales y con menos carga política como Todo va bien.
En los 80 volvería al cine convencional de 35 mm y rodaría películas envueltas en polémica como Yo te saludo, María. A finales de esta década comenzó a trabajar en una serie documental titulada Histoire(s) du cinéma, en la que daría su particular visión sobre la Historia del cine y que Canal Plus francés emitió en el año 2000.
Temeroso de la oscuridad donde vagamos
o nos desvanecemos juntos,
imagino una luz
que impedirá que nos apartemos demasiado,una secreta luna o un espejo,
una hoja de papel,
algo que tú puedas llevaren la oscuridad
cuando estés lejos.
Kenzaburo Oé habla sobre el paso (que yo no espero dar nunca) que dan las personas para convertirse en adultos: el momento en que renuncian a luchar, con pasión, por sus sueños y, extrañamente, se sienten bien.
La novela comienza cuando Bird está a punto de hacer realidad el sueño de su vida (un viaje a África). Sin embargo su esposa da a luz un niño deforme que, según las previsiones, pasará en coma toda su vida.
Bird se enfrenta entonces a una existencia encadenado a un hijo vegetal , situación que le lleva a pensar que, quizá, lo mejor sea estrangularlo.
Con el apoyo de su amante, Himiko, comenzará un recorrido por los infiernos que le conducirá hasta su salvación personal .
Si buscabais un buen libro que leer, aquí lo tenéis.
Contrapunto -quizá la más famosa de las novelas de Aldous Huxley y uno de los libros más eminentes de la literatura inglesa del siglo veinte- es ante todo un examen apasionado y lúcido de la condición del hombre en el mundo moderno. Las criaturas de Huxley no son sin embargo meras representaciones intelectuales, están animadas por una rigurosa pasión literaria o vitalismo, que se opone tanto a la esterilidad del ascetismo profano como al sensualismo de la civilización actual. Los personajes de Contrapunto coinciden, discuten, se apartan y se reencuentran en una busca interminable del significado de la vida y el auténtico destino del hombre. Rampion, que recuerda la inolvidable personalidad de D. H. Lawrence, es quizá, por oposición, la clave de este libro singular, verdadero contrapunto de ideas, emociones, sentimientos, deseos y esperanzas, el acabado cuadro de una sociedad que se desintegra en contradicciones irresolubles.
Las mujeres que creían que el amor compensaba la pérdida del mundo podían convertirse en terribles estrobos, según sabía demasiado por experiencia personal. Le gustaban las mujeres, el amor era un placer indispensable. Pero ninguna valía la pena de enredarse por ella en fastidiosas complicaciones, nada valía la pena de desarreglar la propia vida por su punto.(A.H.)
"He querido meditar sobre ocho particularidades propias a la percepción romana del mundo sexual: la fascinatio del fascinus, el lubridium inherente a los espectáculos romanos y a los libros de las satura, las metamorfosis bestiales y su contrario (las novelas de antropomorfosis), la multiplicación de los demonios y de los dioses intermediarios en la triple anacoresis epicúrea, estoica y cristiana, la mirada oblicua y luego postrada, la prohibición de la felación y de la pasividad, el taedium vitae que se vuelve acedia y, por último, la transformación de la castitas de las matronas republicanas en la continencia masculina de los anacoretas cristianos. Son todas esas palabras oscuras las que poco a poco se aclaran en el espanto. "La visión de la representación más directa posible de la cópula humana procura una emoción siempre extrema de la que nos defendemos, ya sea mediante la risa salaz o mediante el estupor escandalizado. "Los antiguos romanos, a partir del principado de Augusto, optaron por el terror. "Fue un terremoto, cuya consecuencia fue más importante que la cristianización del Imperio, más importante que las invasiones de los siglos V y VI, que no alteraron fundamentalmente su naturaleza, más importante que el descubrimiento del Nuevo Mundo en el siglo XV: los americanos que en nuestros días viven allí, después de haber exterminado todo lo que era un obstáculo para su dominio, se siguen rigiendo por este sistema de infundir temor y se reproducen, en el vientre de sus esposas, acompañados de un terror que procede más de las togas blancas de los Padres del Senado que de las togas negras de los Padres cristianos que los reemplazaron en la curia. No era la Biblia lo que los Padres puritanos que desembarcaron en el valle del Ohio o que levantaron sus capillas de madera en la bahía de Massachusetts llevaban en su equipaje, sino más bien el taedium que Lucrecio desarrolla, el rencor que vemos en Séneca, la violencia indecente que leemos en Suetonio o que presentimos en Tácito, y que los llevaron a huir del antiguo mundo" (pág. 240).
¿Dónde estuvimos que nos perdimos tanto? ¿Quiénes fuimos que ahora no nos reconocemos? Dinastía de gallos decapitados tiñendo la hierba. ¿Por qué siguen corriendo los sueños rotos? Desapareces en el dolor, tus heridas me borran.(J.O.)
Libros para disfrutar, para crecer, cuatro, hay más, hay muchos libros, hasta se pueden leer, página a página, gozando, aprendiendo.
Es sábado, brilla un sol magnífico, la vida reluce, hay un tiempo para cada cosa. Ahora no es momento de leer, ni esos libros ni ninguno. Ahora, hoy, es un momento para salir a disfrutar de todo, de quién somos, de que estamos vivos, de los otros, del calor, de tantas maravillas como tenemos a nuestro alcance.
Estoy feliz y quiero compartirlo contigo.