Mary Ruefle
ACERCA DE LA EXISTENCIA ESENCIAL
El caballo montó
a la yegua lenta y precisamente
y después paró.
Le molestaba profundamente una hebra de paja.
Lo distraía profundamente el triste juguete
dado vuelta en el árbol.
Lo desconcentraba profundamente media nube
por el rabillo húmedo del ojo.
Y después siguió.
Nada se les olvida a los amantes
excepto quiénes son
Mary Ruefle
(de Por qué no beso bien.)
3 comments :
Gracias por dibujar el cuervo
afuera de mi ventana.
Gracias por dibujar las arrugadas bayas agridulces
que dan brillo a la ceniza roída.
Gracias por dibujar el tronco, el montículo.
Gracias por dibujar el horizonte así.
Gracias por dibujar a la mujer de pie.
No está diciendo nada. Me gusta eso.
Gracias por dibujar el rayo seco.
Gracias por dibujar el pasto
que trepa por sobre la bola de metal.
Gracias por dibujar los cielos despejados.
Gracias por poner color
con la forma de una mandarina a la deriva
de pájaros que se alejan hacia el sonido de un arpa
que encarna un cielo que sólo puedo imaginar.
Me gusta este dibujo.
Lo miro todos los días.
Gracias por no hacerlo una película.
Es que los caballos son muy especiales, y tiquismiquis, lo sé porque he tenido uno y porque acompañé durante su agonía a otro muy viejo que lloró antes de expirar acostado en la hierba mirando una nube.
No nos dice la poeta si la llegua llegó a notar esas pequeñas historias sin importancia que amenizaron la cúpula de su distraido y maniático amante.
Parece un poemario tentador, Pedro.
Uhhhhhh Pedro!!! perdon pero otra vez me rio.
Inevitable pensar que esta autora y sus poemas, en su estilo, te pintan de cuerpo entero(je je je opinion..jjajajaj) Abrazo en esta tarde de lluvia en que me estoy riendo demasiado.
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