Agota Kristof,
Mi
enfermedad de la lectura me traerá sobre todo reproches y desprecio:
«No hace
nada. Se pasa el día leyendo.»
«No sabe
hacer nada más.»
«Es la
tarea más pasiva de todas.»
«Perezosa.»
Y, sobre
todo, «Lee en vez de…».En vez de qué?
«Hay miles
de cosas más útiles, no?»
Incluso
ahora, por la mañana, cuando la casa se vacía y todos mis vecinos se van a
trabajar, tengo un poco de cargo de conciencia por instalarme en la mesa de la
cocina a leer los diarios durante horas en vez de… fregar los platos del día
anterior, ir de compras, lavar y planchar la ropa, hacer mermeladas o pasteles…
Y, ¡sobre
todo!, en vez de escribir..
Agota Kristof,
“La analfabeta”
3 comments :
Leo. Es como una enfermedad. Leo todo lo que cae en las manos, bajo los ojos. Diarios, libros escolares, carteles, pedazos de papel encontrados por la calle, recetas de cocina, libros infantiles. Cualquier cosa impresa. Tengo cuatro años. La guerra acaba de empezar. Vivimos en un pueblecito que no tiene ni estación, ni electricidad, ni agua corriente, ni teléfono.
Beso de buenas noches.
Tiene muy buena pinta.
Muchos padres de hoy deberían leer este libro(eso pienso), entonces comprenderían lo maravilloso de la lectura, lo que provoca en un niño y luego en el joven y adulto, pero primero en el niño.(nada mas y nada menos que cambiarle la visión del mundo para siempre).
Frases maravillosas y reflexivas surgen de la autora, y ese "ser analfabeto" frente a lo desconocido que se abre...
Todos lo somos alguna vez en una situación u otra, pero obvio que esto, está enmarcado en un contexto complejo, guerra, desarraigo...por apenas mencionar algo...adaptación forzada, destino...porque aquí también queda expuesto que no siempre podemos elegir...Algunas cosas simplemente "llegan" y hay que ver, que hacemos con ellas. Abrazo Pedro!!
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