Esto te pasa por preguntar.
Pues sí y etcétera.
Esas
cosas del sí pero no.
Lo decía Pirandello “Yo soy él que fue Matías Pascal”.
Evidentemente
tú no eres la que eras o quizás yo no soy Matías Pascal.
Sé que hay contradicciones entre alegrarme tú a mí y contagiarte yo a ti un vago desasosiego.
Que no, que resistir con red es menos resistente, en las barricadas el sonido de los tambores es más real, incluso se oye.
No
solo estoy triste, también aburrido y eso es peor, la desgana, el ya no, el a
mí que me cuenta, es decir el pedir un abrazo y que te den una coliflor,
cuestión de sensibilidad, posiblemente de falta de tiempo, ya el matiz es lo de
menos, lo más es el abismo, la negrura, lo imposible, que no son los años que
es el frío, la frialdad de dos figuras mirando cada una para un lado,
ensimismadas en su sombra, en atribuir al otro nuestras carencias o nuestros
deseos o así lo siento aunque siento tantas cosas que me falta pecho para
contenerlas, que no me escribo, que te escribo una y otra vez aunque no me leas
como yo quisiera que me leyeras pero ya sabes que llueve donde llueve y a veces
a destiempo, las cosas nunca son como eran, seguimos, sigamos, aún como
autistas, esas cuatro paredes, Tú, tu vida, lo que eres, yo sin saber quién
soy, si aquel Matías o este hombre que duda y se confunde, que resiste tanta
emoción ya no sé cómo, que se rompe cada día y disimula, que es tan débil pero
no es eso, quién lo diría, que levanto la barbilla y corro, nado, subo al monte
o me arrodillo, yo no resisto, yo vivo, estoy vivo y habitado por todos los
colores, que te hablo con el alma, ha subido el pan, ayer la leche, hay
confusión en los mercados, las lechugas son verdes, el mar azul y el cielo que
a veces se ve de tu ventana también, han muerto ya las mariposas y no te creas
todo lo que sabes, no dudes, hay un agujero en la duda, hay un nido de
golondrina en el alero, hay el eco del ladrido de un perro que desapareció en
diciembre, hay la certeza de que hasta aquí no has llegado, linda, cuestión de
forma y fondo, ay, señor. Señor.
8 comments :
Me resulta difícil este texto porque dices Pedro, y es demasiado íntimo como para inmiscuirse u opinar. Supongo que será tu Pedro o el que era. Para mí esto es vida con literatura y no literatura con vida.
Qué gracia, si creyera que es literatura, opinaría desde fuera como lectora, pero si hay una simple duda, la recepción es distinta. Hay como un hilo visible , una cuerda invisible para el caso que sea necesario. Como un rescate porsi, incluso per se.
Cosas que tiene un sábado de madrugada
Luz pues lo he cambiado, ya ves. Sucede que la rutina puede confundir la velocidad con el tocino y lo que es un ejercicio de pura distracción se mezcla con el diván y la ficción suplanta la realidad o la modifica o vaya usted a saber porque una frase te lleva a la otra y acabas contando la pena de Murcia cuando ya te gustaría seguir en el bostezo de los días porque es demasiado atrevido hablar de literatura cuando uno escribe lo que escribe sobre todo después de leer Literatura pero, ahí te doy la razón, lo del hilo invisible, cierto, hilos de ida y vuelta, la madeja entera, puro ejercicio de distracción, contar lo que no se cuenta. Está estudiado, lo de la palmada en el hombro, una droga para espíritus sensibles. Yo qué sé.
Prefiero no decir nada, es demasiado íntimo. O, no, y te lo has inventado todo.
No tengo ni idea.
Beso de sábado.
Pues algo sucede con Pirandello y los fines de semana
y tanto sucede o no..
que creo que era en este post donde me tenia que agachar y procurar hacerte reír y no en el anterior..pero no importa!!! Sin explicaciones es mas bonita la vida..al pan pan y al vino vino.. Besossss
Nunca es atrevido hablar de literatura.
En una materia que tenía que tragar entre otras, "Introducción a la literatura", uno de los apartados era: "Qué es la literatura". Ahí me di cuenta del absurdo. Cada "erudito" a través de todos los tiempos opinaba distinto a los demás.
Lo mismo sucedía con la filosofía.
Recuerdo que era una tortura innecesaria aprender todo esto ya que lo que lograban era enterrar más el concepto y la práctica.
Eso pasa también con las
"Arte Poética", ¿hay algo más absurdo que un poeta reglamentado a su gusto la poesía?
Es verdad que hay momentos que empiezas con una madeja dale y dale que terminas con un nudo sideral.
Y sale lo que está ya madejado y vas desmadejando lo que la madejadora fue hilando y zás. Es lógico todo lo que se va desarrollando después y acaba en lo que acaba o no acaba. Pero qué importa.
(Mareante)
Una palmada en el hombro es una mano dedicada. Y eso es mucho en estos tiempos. Me parece.
Moony-A media luz pasa a menudo, no tener ni idea, no tener ideas, a veces cierro los ojos y se me queda la mente en blanco (bueno, en realidad en negro) y no puedo pensar en nada y me agobio (me hace falta poco para agobiarme, me he vuelto un hipocondriaco total) pero luego los abro y veo y me agobio más, un sin vivir. Jajajajajaja. Que tengas un domingo esplendoroso.
eli mendez fíjate si tiene gracia la cosa, ahí es madrugada mientras que aquí son las 9,27 H, es domingo y la vida brilla (no así el día que está brumoso aunque a la mediodía lucirá un sol de final de febrero). Escribo dos libros más y me voy a pasear con mascarilla y dentro de los límites de mi ciudad sitiada. Besísimos.
Luz tienes razón, hablar de literatura es como hablar de la pandemia. Siempre sale en televisión un “técnico” que dice algo diferente. Epidemiólogos, médicos de cabecera, enfermeras, anestesistas, radiólogos, camilleros, fontaneros, albañiles, todos tiene una teoría diferente, un algo más, un tic que les distingue, siempre hay uno que es más listo que nadie y “los medios” están atentos para captar al sabio y al friki, al intelectual y al tonto del culo, el espectáculo debe continuar, aunque sea esta pandemia que nos está matando lentamente.
Ah, la última palmada que me dieron fue más bien un empujón, demasiado brusco, hay amores que matan (y otros que te consumen lentamente).
Saludos con un pañuelo blanco
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