sobre la empatía
sobre la empatía
suena como un pájaro
rompiéndose los huesos pequeños contra el vidrio. el menor de ellos, un
gorrión, por supuesto. estás a punto de servir la comida y ésta es la escena.
culpa al pájaro, las ventanas inoportunas, trata de no pensar en el
inconveniente de la sangre que salpica de violeta el anochecer. ¿cómo puedes
comer después de esto? no pienses a quién culpar cuando el menor de nosotros se
interrumpe tu próximo momento. un panel que se abre sobre otro. el menor de
nosotros estropea tu cena.
~
su olor será humo y peste.
rezongarás durante días, la injusticia de salpicar tu ventana. pájaro tonto.
civilización. casa con vista. maldito comedero para pájaros. te tomará una
semana, mientras la carne empieza a pudrirse bajo las plumas menguantes,
mientras la sangre se congela y se atasca, hasta que te des cuenta de que nadie
está viniendo a llevarse el cuerpo. es tu pájaro muerto. es tu vidrio. tienes
opciones, piensas. alquilar. mudarte. dejarlo para los pájaros negros más
grandes.
~
sentirás la podredumbre
justo sobre la punta de tu lengua. tanto que te revisas para asegurarte de que
no eres tú. el pájaro merece algo. vas al armario, elegís una caja de zapatos.
¿de descuento? ¿de diseñador? empiezas a pensar cómo se llegó a esto: ponderar
tu mortalidad a través de un pájaro. un pájaro muerto. no importa. no te parece
un problema evitar chocarte contra las ventanas.
~
es una monstruosidad y
empezamos a amontonarnos como nubes extensas en tu patio. te maravillas de
nosotros, hermosos, recogiendo y soltando nuestros cuerpos oscuros desde el
cielo blanco hasta tu gramilla. y después llega. más huesos y sangre. uno por
uno chocando contra el panel cerrado. pájaros inconscientes. plumas marrones y
grises. parásitos asquerosos. el otro. comedero de mierda. parecemos miles de
millones levantando vuelo y luego destrozos.
~
podrías encontrar una
humildad delicada en el arte de limpiar vidrios. es tu trabajo, sostener
astillas pequeñas de carne desgarrada. las puntas de tus dedos cantan. pedazos,
carnicería, es demasiado. tienes cuidado de levantar todo lo que puedes ver.
llamas a un vidriero. tienes cuidado de levantar todo lo que puedes ver. tiras todo en grandes bolsas de basura
brillantes. tienes cuidado de levantar todo lo que puedes ver. consideras
colocar puertas francesas. tienes cuidado de levantar todo lo que puedes ver y
encuentras más con cada viaje que haces descalzo a través de tu casa bañada en
sangre.
Traducción: Yanina Audisio.
1 comments :
Tremendo
no se si se puede agregar algo
Una palabra que decimos cada vez mas a menudo pero que en la intimidad practicamos cada vez menos. Impresionante esta escritora. Besos de temporal por aqui.
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