De juicios
Debo confesar que en toda mi vida
solo he asistido a un juicio una vez, como espectador. Me sorprendió la dureza
de la juez con un testigo, pobre, un señor mayor al que metió una bronca del
copón, le dejó temblando; en aquel juzgado no se movía ni dios, eso que era una
cosa de tráfico. También he visto muchas películas de juicios, desde “Doce
hombres sin piedad” y “Testigo de cargo” hasta ahora. Es decir, como de tantas
cosas, no tengo ni idea de juicios.
Pero este juicio de ahora,
retransmitido en directo, no es una broma, no es un show, no es un concurso de televisión,
es nada más y nada menos que el juicio a los líderes del proceso
independentista catalán, Causa Especial 20907/2017, conocido como el juicio del procés. La
acusación está formada por la Fiscalía del Estado, la Abogacía del Estado, ah,
y Vox como acusación popular (qué vergüenza). Según el código
penal español, acusan a los
procesados de delitos de rebelión,
malversación y desobediencia,
delitos penados con muchos años de cárcel, en algunos casos con más de 20.
Recuerdo que los acusados permanecen en prisión preventiva desde noviembre y
diciembre de 2017.
Estoy siguiendo el juicio con
atención. Leo periódicos de tendencias variadas (tampoco hay tantas, las que
les marcan a los que “informan” y a los que “opinan”) para estar más enterado.
En algunos casos parecen dos juicios diferentes, de dos planetas en dos
galaxias.
Escucho a los acusados y creo
en su buena voluntad, sobre todo creo que no se esperaban esto. Como soy un
ingenuo parcial creo más unas cosas que otras.
Escucho a los testigos entre
los que se encuentran, por ejemplo, M. Rajoy, Saenz de Santamaría y Zoido y se
me abren las carnes, esta gente ha estado dirigiendo el país. Se entiendo todo
mejor.
Veo la actuación de algunos
fiscales, de la señora fiscala (¿se dice así?), de la abogada del estado y
flipo pero ya he dicho que no entiendo de casi nada, solo me queda sentido
común y algo de sentido crítico. Sin embargo veo al presidente del Tribunal, Manuel
Marchena, y me parece que lo hace bastante bien, con seriedad y profesionalidad
(dejo los matices para más adelante)
Me parece que este juicio,
ojalá no, puede terminar como el rosario
de la aurora (para los acusados, claro).
Quiero creer en la Justicia
pero la realidad es tozuda y no sé yo...
0 comments :
Publicar un comentario