Este es mi lunes.
Times
New Roman no, escojo Georgia, cada tipo de letra tiene una historia detrás, no
estoy para historias, estoy saturado de historias, de cuentos, de imaginar, de
hacer gala de…¿de qué?, basta ya, se acabó la fiesta, extiendo un velo morado
sobre esta página y me inclino ante mi propia mano tendida, me rebelo ante mi
mendicidad, me muerdo con saña el brazo enganchado en la alambrada, me abofeteo
con fuerza, con rabia, sin disimulo, no quiero engañarme, me da miedo saltar
desde el trampolín, lo reconozco, temo que alguien quite el agua de la piscina,
como en una película de dibujos animados, algo así como un correcaminos cruel
que me cambie los carteles, que me guíe hasta el desierto, que además se burle
con sus beep beep, ¿qué diablos hago en esta pantalla?, ya no me gusta el cine,
me quedo dormido a mitad de la sesión, la televisión también me duerme, esto ya
lo he visto, leído, escuchado, sentido, vivido ¿estaré repitiendo mi propia
vida?, en cualquier caso he empezado por repetir los errores, por acumular
absurdos ante la puerta verde que da a ninguna parte, lo peor es que lo sé, por
supuesto que lo sé, estoy en una cornisa del Chrysler, los turistas
japoneses miran mi balanceo, delante y atrás, sin decidirme, aplauden, creen
que es un atracción más, que me tiraré con una capa roja y volaré, qué
cabrones, no saben que no hay ficción, que duele ser, que la verdad tiene que
estar en alguna parte, que de tanto buscarla me he perdido en un bosque con hojas verdes inundando las avenidas de mi
ciudad vacía en esta mañana brumosa, los que alborotaban la noche con su triunfo por fin se
han dormido, los demonios que me rondan no, bailan dentro y fuera de mi cabeza
con sus cuernos brillantes y sus tridentes afilados, susurrándome obscenas
invitaciones, invitándome al mal, a pasar la raya, al lado oscuro, esa zona
prohibida dónde me he acostumbrado a vivir, encogido y atemorizado pero sin
querer abandonarlo, disfrazándome de otros pero sin creérmelo, ¿sé quién soy?,
metonimia de un aprendiz de brujo angustiado, chapoteando en el bien, en lo que
antes era el bien, antes que un ejército lujurioso moviera las fronteras,
invasión de Polonia, conquista de un territorio sin ejército que lo defienda,
países desaparecidos bajo las aguas impetuosas de una presa rota, débil
construcción de ladrillos amalgamados que apenas contenían el deseo no
menguante, al contrario, corredores sin meta a la vista, jadeantes atletas de
su propia negligencia, escucho el ruido de la tormenta y no tengo a la vista
ningún lugar donde guarecerme, lo peor son los rayos, lo peor es que esta
intensa lluvia de desilusión se puede llevar por delante sembrados y aperos de
labranza, animales que mugen y las gallinas, el grano acumulado y la esperanza,
es hora de partir, este es mi lunes.
2 comments :
Me ha fascinado. Esa fuerza de expresión en este escrito.
Creo tengo un virus. Porque cuando intento publicar un comentario o se me para Internet, con mi nombre me pone imágenes de descartar para demostrar que no soy un robot. Me pasa bastanónimotimamente. Así so esto se publica pues ya toca!!! Con anónimo, pude publicar. Mi firma de escribír tipo tekegrama. Creo se reconoce. Su lectora
Vaya! va y se pública. No lo repase. Parece chino. Eso sí me cabrea. Estoy muy cansada. Estoy durmiendo con mi madre, la tengo ingresada.
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