Devaluación del poeta.
George Tooker
“Niños y espásticos / Children and Spastics
En 1946, casi al principio de su carrera, Tooker pintó esta obra. El trabajo muestra un grupo de muchachos amenazando a un trío de homosexuales. Es una de las pinturas "más crueles" que hizo Tooker, dice el historiador del arte Robert Cozzolino. El artista comentó que eran "cosas de las que había sido testigo, o que sentía que había gente capaz de hacerlas."
Excepto en D.F. a un poeta se
le coge por el cogote y se le saca a la ventana, al viento, se le sacude el
polvo de las alas y ya, que hable solo.
Total es igual lo que diga, la
rima, el ritmo, la piel, lo de dentro, el hueso del albérchigo, la descripción
exacta de la agonía de un mirlo, versos de hombres brutales y mujeres
silenciadas, flores de papel amarillo, a quién le importa.
Un poeta apenas roza las altas
lilas de primavera, no se baña en el rocío que cubre los sepulcros, salpica luz
en los corazones equivocados, apaga las zarzas que arden en el atardecer de Elantxobe,
con un estilete corta las sábanas que ocultan la alameda.
Pero.
Nadie ha visto a un poeta comiendo
espaguetis en un bar de la plaza Catalunya; nadie ha compartido con el poeta ese
momento en el que es penetrado por Erato, por la inspiración, el zumbido o la
onomatopeya; nadie sabe que en el piso quinto derecha de su misma casa vive un
poeta; nadie ha matado a un poeta con sus propias manos ni lo ha desollado después
con una navaja de cristal comprada en Albacete; nadie sabe en realidad para qué diantres
sirve un poeta.
Que siga en la ventana, que le
den.
Erato.
0 comments :
Publicar un comentario