Parker, Kafka y su espalda.
Lumbago. Parker está tumbado sobre la cama como un cangrejo, como el bicho ese de Kafka. Ha intentado levantarse pero le duele mucho el cuerpo y el alma, no mueve las piernas porque el dolor es agudo. “Eso te ha ocurrido cuando saliste del súper con dos packs de leche, que eres un bruto” (dice uno). “Seguro que te ha dado por quedarte dormido en el sofá “(dice otro). “A tu edad ya no puedes hacer esfuerzos” (remata aquel). Parker procura estar quieto, deja la mente en blanco. Om.
Mientras tanto, de alguna parte han salido las famosas y diminutas arañas negras de la melancolía, muchas, se acercan a la cama, suben por las sábanas y en pocos minutos han cubierto el cuerpo de Parker, entran por los orificios de la nariz, inundan su cerebro y ya está el cuadro completo: la parálisis mental y corporal. Fuera llueve. Vaya racha.
Nota: Parker es vergonzoso para pedir pero en su nombre agradecería remedios caseros para la lumbalgia.
2 comments :
Vaaaya por Dios!! lo siento y encima del lumbago, melancolía, q no sé q es peor. Para el lumbago calorcito, reposo y lo más efectivo, un buen pinchazo de Voltaren, en dos horas estás como nuevo, pero nada de cargar peso, ni hacerte el héroe, q si no los bichos volverán a apoderarse de ti.
Abrazo suavecito ;)
María, el lumbago medio curado y hacerme el héroe me sale de fábrica, no lo puedo evitar, cojo y todo camino por la playa como un atleta de medio fondo (aunque luego no pueda ni agacharme). Bichos a mí. Abrazo salvaje (menudo soy)
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