No cumpleaños.
En teoría hoy es mi cumpleaños.
Pero no es cierto.
Me he despertado dulcemente. Estaba aún en la cama, tranquilo, leyendo “Regreso a Berlín” de William Shirer, cuando a las ocho y un minuto ha sonado el teléfono.
Ringgg, ringgg, ringgg…
Dígame -he dicho-.
Oiga, mire, es usted Pedro Martínez -me han preguntado-.
Sí -y por la voz he pensado que me querían intentar cambiar de compañía telefónica-, ¿qué desea?
Mire, que hemos detectado un error en su ficha personal y que debe pasar por nuestras oficinas -me dice una voz de señora o señorita entrada en años-.
Perdone, ¿qué ficha, qué oficina? -pregunto intranquilo-.
Ah, perdone, es que tenemos un lío…sí, mire, por el Registro Civil -me dice-, esta misma mañana a las 12 y 13.
Pues eso, que entre que me he planchado una camisa, me he hecho el nudo de la corbata que no estoy acostumbrado, me he preparado y eso, me ha llegado la hora de ir.
Omito el viaje ¿vale?
Me presento en una ventanilla y digo -buenos días, que me han llamado.
¿Es usted Pedro Martínez? –me pregunta un señor de bigote.
Sí –contesto.
Haga el favor de ir al despacho número 7 –me solicita, amable-.
Voy. Entro al despacho. Hay una bella dama sentada detrás de una mesa llena de expedientes.
Pase, pase –dice- buenos días, siéntese.
Me siento.
Se coloca unos lentes, rebusca en una carpeta de piel, encuentra un papel amarillento, carraspea y me suelta – Don Pedro, según el último censo usted no ha nacido – me mira por encima de las gafas y sigue – o si ha nacido, ha nacido después de lo que dice este papel traspapelado.
¿Qué? –exclamo, atónito.
Sí, lo que le he dicho, no me gusta repetir –y eleva el tono de voz- o no ha nacido o lleva usted viviendo bastantes más años de los que le corresponden. En cualquier caso usted o no tiene edad o no tiene la que tiene, lo estamos investigando.
Me quedo de una pieza, solo me sale decirle –pues mire, en teoría es, o era, mi cumpleaños y esta tarde tendré la casa llena de invitados a una fiesta.
Usted verá –dice- puede celebrar lo que le parezca, pero su cumpleaños no es, que quede claro.
¿Puedo reclamar o algo? –digo-.
No, de momento usted no existe. Cuando exista hay un formulario que pondremos a su disposición. Puede retirarse –dice tajante.
Y me retiro. Salgo del Registro mirando al suelo y pensando en lo efímero de la vida, tanto tiempo viviendo y no he vivido. Y ahora qué hago con la fiesta, con la cantidad de comida, ginebra y pasteles que he comprado.
Bah, ya me arreglaré. De cualquier forma, hasta este año, hoy 25 de enero, era mi cumpleaños.
2 comments :
Feliz Cumpleaños! Te deseo un día grande!!!😘😘
Muchísimas gracias, Encarna C
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