Solía serlo.
La vida en ti fue un pez de 20 centímetros.
Tu remoto latido, hoy petrificado,
vive ahora en mi cuerpo
tan inverosímil como el tuyo.
(José Watanabe)
Tu remoto latido, hoy petrificado,
vive ahora en mi cuerpo
tan inverosímil como el tuyo.
(José Watanabe)
Solía
serlo.
Lo
he dicho demasiadas veces: esta pretendía ser una página literaria.
Estaba
equivocado, no puede serlo.
Es
una bitácora que me permite dejar parte del trabajo de aprender a escribir mezclado
con imágenes y música, pero sobre todo el privilegio de disfrutar de la
comunicación con tantas personas.
Este
blog es una afición, que me da satisfacciones, un vicio que me hace pensar,
sentir, imaginar, trabajar, leer, aprender, dar, me enseña, me enriquece,
libera, que me ayuda. No aprendo a escribir pero lo intento.
Busco
la densidad en el lenguaje, en lo coloquial, acumulo metáforas, escarbo en lo
cotidiano, lo pinto con surrealistas situaciones, dedico ilusión a esta
actividad –te veo- rebuscando en historias que ocurrieron, que no, que imagino,
que están en recuerdos de niñez, de después, en lecturas grabadas en el cuarto
oscuro, en deseos no satisfechos, en mañana.
Dedico
a esta actividad el tiempo justo, que no suplante lo importante, que no
interfiera en lo principal: vivir con los otros.
Soy
lento, ahora, estos días, estoy aprendiendo que a pesar del anonimato, de los
nicks, del juego, detrás de todo lo accesorio de los blogs, de los muros de FB,
están personas de verdad, con sentimientos, problemas, realidades, vivencias,
soledad, compañía, necesidades, deseos.
Nunca
es tarde.
Esta
es mi mano.
3 comments :
Gracias por tus letras Pedro. La pintura inferior es muy hermosa.
Decía que para ser un borrador te salen muy nítidos los textos.
Ya ves, Frodo de Cretacan, la perseverancia donde lleva.
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