Una niña de melena lacia
En aquel tiempo los chinos creían que los
peces eran almas fugadas. Inmóviles, los miraban hora tras hora. Y si un pez
atravesaba su imagen reflejada tenían el convencimiento de que aquel animal era
parte de su propio ser.( Max
Aub)
Vi a una niña de melena lacia apoyada en una barandilla, sonreía.
No me atreví a hablar.
La recordé desde entonces, día a día.
El tiempo ha pasado como en un sueño, perezoso, rápido, atroz, ligero, lento, ha pasado.
Una vez volví a verla, con su melena lacia, aún sonreía.
Me acerqué a hablarla.
Dijo que no me conocía.
El tiempo ha pasado, recuerdo a aquella niña que existió en mi
cabeza, recuerdo quién era yo entonces, recuerdo pocas cosas más. Ahora que
tengo tanto tiempo apenas tengo recuerdos. Ni siquiera sé si estoy vivo.
0 comments :
Publicar un comentario