No creas que (te) olvido.
No de este modo
No será desde luego
hundiendo el tenedor
en el corazón de las golondrinas
como nos alimentaremos de libertad.
(Julia Otxoa)
No será desde luego
hundiendo el tenedor
en el corazón de las golondrinas
como nos alimentaremos de libertad.
(Julia Otxoa)
No creas que (te) olvido, que me he cansado.
No creas los vaticinios, no creas nada de lo que murmuran, de lo que dicen en susurros bajo los arcos de la catedral.
No les creas, son envidiosos. Desde hace tiempo me persiguen. Vivaz, corro, me escondo en la sombra del ábside, no me atraparán.
Búscame en las regatas, en las carreras de galgos, sentado en mi quitrín, estoy a punto de rozar con los dedos el círculo del universo, Rap, Yob, Oz, Fa.
No me creas, soy olvidadizo.
Huyo y no sé de quién.
Aún así sigo disfrazado, temeroso de la hoguera, del viento que avive el odio, de los señuelos del colmilludo, de las zalemas de la dama pintada, de los gritos de la multitud detrás de la puerta.
Soy este que te mira.
No creas los vaticinios, no creas nada de lo que murmuran, de lo que dicen en susurros bajo los arcos de la catedral.
No les creas, son envidiosos. Desde hace tiempo me persiguen. Vivaz, corro, me escondo en la sombra del ábside, no me atraparán.
Búscame en las regatas, en las carreras de galgos, sentado en mi quitrín, estoy a punto de rozar con los dedos el círculo del universo, Rap, Yob, Oz, Fa.
No me creas, soy olvidadizo.
Huyo y no sé de quién.
Aún así sigo disfrazado, temeroso de la hoguera, del viento que avive el odio, de los señuelos del colmilludo, de las zalemas de la dama pintada, de los gritos de la multitud detrás de la puerta.
Soy este que te mira.
“El ritual de iniciación en su orden implicaba un período previo de ayuno y se realizaba en función del tema astrológico del aspirante. Este, vestido de negro era despojado de sus joyas; recitaba el oficio del Espíritu Santo, mientras los sacerdotes trazaban con sangre de un ave, signos sobre su cuerpo. Debía trazar un círculo con yeso en el suelo y escribir las palabras sagradas: Rap, Yob, Oz, Fa, evocando a las cuatro regiones del universo. Luego penetraba en el círculo, invocaba al Ser, se postraba con las manos en ángulo recto en espera de apariciones. En el vestíbulo de la logia se colocaban colgaduras negras con serpientes bordadas; se administraban bebedizos a los novicios que los colocaba en una situación psíquica de máxima receptividad. Tres hombres les ponían una venda ensangrentada en la frente” (Cagliostro)
20 comments :
Creo en tu no olvido.
¿Me o dices o me lo creo?
Y también se que el corazón de los vencejos no puede parar.
Y que mi paciencia se escurre hacia el olvido.
Pero no me creas, soy escurridiza.
'cosechando un tiempo claro
en el que éramos sin miedo y sin guardianes.'
Te lanzo a Ti estos dos versos de ella, en este contexto, en otro contexto, en el contexto de los huracanes apagados, en el contexto del posible olvido. Pero, Ti,Tú, ¿dónde estás? ¿Titubear es olvido?
Ese (te) es tal vez
indecisión o recuerdo
cosechado.
En todo caso son palabras
muy bien plasmadas.
Pasaba y he hallado un excelente blog. Volveré más veces.
Un saludo
Vengo a tu mesa; soy un envío en representación de (la flor amarilla) algún aroma habrá en este residuo.
Nada sabemos de nosotros pero tenemos este idioma para engarzar la palabra.
"Los últimos ensueños
y las primeras canas
entristecen de sombra
todas las cosas bellas;
y hoy tu vida y mi vida
son como estrellas,
pues pueden verse juntas,
estando tan lejanas...
Yo bien sé que el olvido,
como un agua maldita,
nos da una sed más honda
que la sed que nos quita..."
Imposible olvidarte...
Besos, todos.
No te creo Tinta de aterrizaje, de hecho no me creo casi nada.
Me miente hasta el espejo.
Pero el vuelo de los vencejos es otra cosa.
Ay, eso, qué cosas.
Tempero no titubeo, no ahora, quiá, avanzo a pesar de (o por eso) de tantos ojos flotando en un espacio inconcreto.
Hay miradas como cuchillos.
Menos mal que otras son acariciadoras.
Buscando entre la hierba es pasmoso lo que se puede encontrar, objetos tan extraños como una guadaña o un microscopio.
Están las calles llenas de personas con la nariz larga.
En cambio esta calle, ya ves, se está convirtiendo en un tablón de anuncios.
Te envío una mariposa.
(Avísame si no llega, es distraída)
Marisa muchas gracias, eres bien recibida, lo serás siempre que vuelvas.
¿Qué se ve desde esa ventana de tu perfil?
Un saludo
moderrunner, esto de los blogs permite ejercicios en los que se entiende hasta lo que no se entiende.
Ahora mismo estoy cabeza abajo leyendo tu comentario.
Se me está bajando la sangre a la mirada.
Y con este calor…
Gracias por volver.
Arantza G.
Viendo pasar las nubes fue pasando la vida,
y tu, como una nube, pasaste por mi hastío.
Y se unieron entonces tu corazón y el mío,
como se van uniendo los bordes de una herida.
Besos a ti ¿Cómo va tu coche?
Mira Pedro, desde que regalaron 'Chant Byzantin' cantado por la monjil Soeur Marie Keyrouz he decidido que prefiero al Barón Rojo que al canto eclesiástico y/o gregoriano. Será falta de entendimiento sí.
Sí, igual sé que muchas personas no (me) olvidan. Mi mamá (me) mima. La Habana me gustó mucho, más el desolado Puerto Esperanza (metáforá y realidad de Cuba), pero prefiero el tilburí a la calesa. Una que es medio pija.
Besos de jaca.
Delicioso.
Y el verde de su mirada oculta, también.
Un besito admirador
¡Qué lindo: "quitrín"!
Gracias a ti me voy de farra en mi quitrín, un beso volado, da gusto leerte!!!
Eres como varón embozado tras la capa de otros siglos, que con asombrosa prosa y maravillosas melodías enamora mentes y despierta admiraciones.
Por un momento, tras el lance con tu espada literata y fijada tu mirada verde, la realidad está de más.
Un beso
El olvido es sólo una salida. Como un defensa siciliana del corazón.
Te sigo.
Ventana indiscreta en la música, como en todo, hay un momento para cada cosa.
Sobre todo para conocerlo y escoger después.
Es una suerte que no te olviden, que te mime (tu mama).
Y el resto (creo)
Beso de caballero.
Eso se lo dirá usted a todos Madame Vaudeville.
Su página me gusta mucho.
Gracias por venir.
Un besito admirable
virgi, ¿a que no sabías lo que era?
Yo lo descubrí leyendo La tejedora de coronas de Germán Espinosa que, entre otras cosas, además de un libro magnífico, tiene un lenguaje muy rico.
Como tú de rica. Gracias a ti.
Venga, venga, doña gaia07, que usted y yo nos conocemos y sabe que no me embozo, antes bien, al contrario, me muestro tal y como soy, bien o mal, lo que hay.
Y muy de este siglo (esto…¿en cual estamos?)
Un beso (pero beso, beso)
Ya cristal00k, me sigues, me sigues, pero debe ser muy rápido, corro mucho.
Además tanto que venías por aquí y no vienes nunca, se me están marchitando las flores.
Ah, y derritiendo los bombones.
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