Llamada
" La tierra parecía algo no terrenal. Estamos acostumbrados a verla bajo la forma encadenada de un monstruo dominado, pero allí, allí podías ver algo monstruoso y libre. No era terrenal, y los hombres eran... No, no eran inhumanos. Bueno, sabéis, eso era lo peor de todo: esa sospecha de que no fueran inhumanos. Brotaba en uno lentamente. Aullaban y brincaban y daban vueltas y hacían muecas horribles; pero lo que estremecía era pensar en su humanidad -como la de uno mismo-, pensar en el remoto parentesco de uno con ese salvaje y apasionado alboroto. Desagradable. Sí, era francamente desagradable; pero si uno fuera lo bastante hombre, reconocería que había en su interior una ligerísima señal de respuesta a la terrible franqueza de aquel ruido, una oscura sospecha de que había en ello un significado que uno -tan alejado de la noche de los primeros tiempos- podía comprender. ¿Y por qué no? La mente del hombre es capaz de cualquier cosa, porque está todo en ella, tanto el pasado como el futuro. ¿Qué había allí, después de todo? Júbilo, temor, pesar, devoción, valor, ira -¿cómo saberlo?-, pero había una verdad, la verdad despojada de su manto del tiempo. Que el necio se asombre y se estremezca; el hombre sabe y puede mirar sin parpadear. "
El mar estaba cubierto por una densa faja de nubes negras, y la tranquila corriente que llevaba a los últimos confines de la tierra fluía sombríamente bajo el cielo cubierto... Parecía conducir directamente al corazón de las inmensas tinieblas.
Joseph Conrad El corazón de las tinieblas
S me llama.
Has vuelto a escribir lo de siempre.
Perdona, no te entiendo.
Te he leído. Lo de ayer.
¿Y?
El pobrecito hombre solo.
Sabes que son cosas que invento.
Ya, pero son variaciones sobre el mismo tema. Estás obsesionado, deberías consultarlo.
Es únicamente un post.
Sí, pero no solo eso, aunque tú no lo sepas.
No me líes, cómo voy a saber lo que no sé.
Hay muchas cosas que no sabes entre todo lo que dejas aquí, eres transparente.
¿Tú crees?
Sí.
Cuelgo el teléfono pero me quedo pensativo ¿tendrá razón?
Hi ha un remolí a l'aigua on les paraules
es fan dolces,
on les paraules es fan lentes i clares
com les profunditats.
Hi ha un lloc a l'espai on la veu us ressona,
on la veu us envolta i sedueix
com si cridéssiu dins d'una cova.
Si això us dic és per a sincerar-vos
amb vosaltres mateixos .
No vulgueu descobrir quines forces us mouen.
Hi ha la vida i la mort, immutables.
La resta són paraules.
Estimeu-vos, germans, pel que us dol i us fetilla.
&
Hay un remolino de agua donde las palabras se hacen dulces,
donde las palabras se hacen lentas y claras
como profundidades.
Hay un lugar en el espacio donde la voz os resuena,
donde la voz os rodea y seduce
como si gritárais en una cueva.
Si esto os digo es para sinceraros
con vosotros mismos .
No queráis descubrir qué fuerzas os mueven.
Hay la vida y la muerte, inmutables.
Lo demás son palabras.
Amaos, hermanos, por lo que os duele y os hechiza.
(Gracias, muchas gracias a S. C.)
10 comments :
En la duda esta la certeza...o eso decía mi Abuelo o era Galeano ? Bah...
Bikiños sin llamada. ;)
"¿Cuál es el precio de la honestidad?"
Lo pregunta una niña. Está sentada en el regazo de su padre que acaba de llegar.
Hay tres sillas frente a un televisor. Ellos están sobre una de ellas; justo en la de la izquierda, la que da al aparador; en él, un jarrón de vidrio negro por el que chorrean blancos y azules. También hay un piano de juguete.
La niña levanta el brazo de su padre,mete su nariz en el sudor.
Han preparado el agua para el baño, ahora está caliente. Aún
La voz llega de la cocina
"¡Si tardas se enfriará!"
Por eso se que aún está caliente.
Él la abraza la primera,siempre.
La niña no olvida, asestea, vuelve:
"Dime el valor de la honestidad"
El padre se levanta, la deja parada en el suelo. Le responde:
"El de doce ciudades de cristal. Ni una más, ni una menos"
PD: Es que hablabas de transparencias
Todo lo que hacemos o decimos, u omitimos, habla de nosotros, es nuestro espejo. Muy buen blog, me gustó. Saludos!
Sir Peter.
S me llama.
¿Me permites trocarte el inicio?
Un momento, el justo para sonreír?
El justo para seguir rellenándonos de humor y sensatez.
Muchas veces en la vida, tan sólo, tan sólo, repito, hacen falta dos cosas a las que ni tan siquiera algun@s pueden acceder, porque no pueden, porque no quieren, porque no saben.
Tu título trocado, sir Peter,
S me llama/ Smell-ama.
Ya ves Inglés, castellano, conjunción, sonrisas y un beso libre de tinieblas.
De Miquel, mi asombro por su serenidad.
Un beso.
Las dos cosas, que se me olvidaban:
Sonreír.
Amar.
Los dos Mayte
Y estoy comunicando.
Genial, Nikté, como siempre (sin falsos halagos).
He estado en tu blog pero, la verdad, creo que tenéis mucho tiempo libre.
Bueno, cada uno se lo monta como quiere.
Una (humilde) sugerencia, cuida que el cuarto de los juegos no se te convierta en un jardín de infancia.
Transparente ¿no?
Lo que ocurre Cecilia, es que muchas veces ese espejo está empañado y no nos vemos.
Gracias por venir. Un saludo.
Ventana indiscreta, después de tu regalo (touché) te permito que me troques lo que quieras. Muchas gracias (me llegó en el momento preciso)
Sonreír. Amar. Hay veces que hago las dos cosas a la vez.
Otras solo sonrío (ya ves).
Un beso.
Claro, puro y diáfano. Exacto.
Transciendes del mundo a la imaginación, nos vuelves figurantes de tus historias, que están dentro de las historias de otros, donde el tiempo no cuenta, lo volvemos impotente para amenazarnos, y dejas la esencia, dejamos parte de lo que somos viviéndolas sin padecerlas, enlazamos las palabras con lo que sabemos y no pensamos, porque solo son historias.
Besos.
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