Richard Serra.
El jardín se ha posado en mi jardín.
Toda su galaxia resplandece a medianoche.
Los árboles destellan, las flores fulgen.
Tiene el césped una tersura de nimbo.
Bajan los Transparentes
y de sus cuerpos surgen peldaños de escala.
Los Radiantes me llaman con sus cristales.
Mis años descienden en el cáliz de un instante.
Los Centelleantes me han rodeado
y me tienden sus ojos de oro.
El amor es una paloma de fuego que elevan.
Por fin llegaron.
(Miguel Arteche)
Con frecuencia voy a visitar el Museo Guggenheim de Bilbao.
El domingo a la mañana volví.
Me dije, escéptico, voy a ver hierros.
La Materia del Tiempo de Richard Serra.
Está desde hace tiempo ahí, en el vestíbulo, a la derecha, una pérdida de espacio.
Muchas veces he paseado dentro de La Serpiente.
Esta era sólo una exposición de muchas serpientes.
Entré en la primera de las monumentales elipses, al dar dos pasos me hundí en el paisaje, me convertí en el paisaje, inmenso, sentí presiones, tensiones, gozo, miedo, angustia en los tramos estrechos, sensación de libertad en los anchos, magia siempre.
Pasé a la siguiente escultura y las líneas curvas, los bordes, el material, la esencia del artista me atraparon de tal forma que recorrí como en trance todos los laberintos que me llamaban, me perdí en ellos, miré al techo, al suelo, a las paredes, cerré los ojos y me imaginé dentro de una pirámide en Egipto, en una construcción maya, en las paredes de un castillo medieval, junto a un edificio magnífico, me sentí incrustado en la materia del tiempo.
Luego salí a la calle, el día era gris, el cielo encapotado, con frío, la gente no sonreía, la ría bajaba melancólica, rápida, pero yo era otro.
Impresionante Richard Serra.
A la tarde había quedado con J, con I, les comenté lo que me había gustado la exposición.
Bah, son solo hierros- me dijeron a coro.
Y nos fuimos a San Mamés.
Ganamos 3-2.
Un buen domingo.
26 comments :
Cuando paseé por esos hierros sentí la (im)presión del espacio contenido en formas incesantemente variables.
Entiendo que eso es arte.
Aunque parezcan hierros.
Aunque para muchos sólo sean eso.
Abrazos.
Yo suelo estar muchas veces allí.Dentro. Sintiendo la materia. El espacio. El tiempo. Los hierros del que hablan tus amigos J e I. Es inmenso. Adoro a Serra..
Kisses
P.D. El cochecito de la txupetona entra perfectamente dentro de "esos hierros"...
Me gustan los hierros de Serra, Me gusta entrar en el espacio que encierran porque me gusta salir de él. Me siento ligera al hacerlo, como si dentro hubiera abandonado algo, no sé, cosas mías.
Ahora estoy encantada con Twombly, en cuanto tengo un rato me voy a ver sus nueve discursos.
A San Mamés hace años que no voy, desde tiempos de Salinas, de los torneos de verano... me lo he pasado realmente bien allí. No por el futbol en sí, que, también, es que, me gusta mirar a la gente, sus expresiones... y el bocadillo de tortilla del descanso jajajaja.
Buen domingo el tuyo :D
Un beso grande.
Hierros que te exprimen los sentidos, sacándolos de su sopor, liberándolos.
No te dejan indiferente.
Besos
Es que nunca hay que despreciar la edad del hierro, su inmensidad.
De ahí vendrá la querencia de algunos (entre los que me encuentro) hacia los metales. Digo yo.
Besos con yunque.
Mira¡¡¡¡
Ya tengo dos asignaturas pendientes en Bilbao... Le pediré al señor Guggenheim que me acompañe a visitar el museo de Glup. :)
un abrazo.
ybris, esos hierros, arte o no, han costado una pasta alucinante. Estarán ahí un montón de años (cualquiera los mueve)
El arte al servicio de la financiación (¿de qué, de quienes?)
El arte como moneda de cambio (monedas, muchas, filtrándose en pocos bolsillos).
Y además, con todo, me emocionan (seré gilipollas)
Abrazos.
Camille, déjate de hierros y preséntame a la niña para que diga eso de “es igual que su madre” y le haga carantoñas.
Besos desde la ventana del Iruña.
Moony, ay, o en aquellos tiempos ibas (te llevaban) a San Mamés en el cochecito de bebé o calculo mal y eres una viejuna. (Risas, no te mosquees)
Y tienes razón, lo mejor el bocadillo.
A Twombly no acabo de pillarle, ya ves, nos engañan mucho, por lo menos lo intentan.
(Maldición, hay una errata en el post, el Athletic jugó el sábado a las 8 de la tarde, grrrr. Menos mal que nadie se ha dado cuenta.) Más risas)
Un beso pequeño (que eres muy guapa y me acostumbro)
Arantza G., oye, que también suelo ir a menudo a Artium ¿eh?, para que no haya problemas.
A mi los hierros siempre me han gustado (hubo un tiempo en el que viví de ellos)(bueno, mezclados con carbono)
Besos
Ah, pero no estamos aún en ella Margot.
Espera, es en la de piedra, estamos en la de piedra.
O lo parece.
Besos de tas.
Tres De cenizas, venir a comer conmigo
un abrazo.
ja ja ja mira que yo lo sabía, pero digo ufffff luego me llamará revientaposts si digo que jugó el sábado y que el que jugó el domingo fue el Barca ja ja ja
Ay mi cascarrabias favorito que se ha colao ja ja ja
Huy... si yo te contara de años... :D
Me cuelo muchas veces Camille.
Y me encanta.
Para un tío tan perfeccionista como yo, aceptarlo es una liberación.
O un principio.
No, si al final acabaré siendo una persona normal.
O casi.
Venga, venga, Moony, no presumas.
Aunque lo de Salinas me ha dejado mosca.
No, si al final tendrás mi edad.
Pobrecita mía.
Jajajajajajaja
Mi experiencia fue distinta. A penas diez minutos para cerrar el museo, había estado gozando con Juan Muñoz (una recomendación de una bilbaína morena guapísima la tarde anterior). Rodaba para bajar, y la vi, desde arriba, estuve los minutos restantes detenida en la barandilla, atraída por aquellos gigantes ondulantes que seccionaban de mil formas la nave blanca donde la luz de los focos más que alumbrar crea sombras.
Visitantes como miniaturas con vida propia en una galaxia que existe sin ninguna función necesaria a nuestra lógica, pero suficiente para hacernos dudar de nosotros. Su vulnerabilidad contrastaba con mi posición de privilegio y la impresión de perderme un todo.
Fascinante. Un beso con mil recuerdos.
Ay, Glup, esa imagen de Santa Águeda! si es que ma dan ganas de coger el cuchillo que se ofrece a la mano y rebanar el cuello de los verdugos.
Los hierros de Richard Serra: me gusta como los describes tú, las sensaciones que te producen.
Pues cada vez que visito "tus hierros" (que me gustan mucho) siento la sensación de estar abrigada por ellos, los encuentro hasta cálidos, me siento bien en su espacio y los disfruto.
Un beso
Que apetecible tu plan dominguero... me ajuntas? Besos
He estado en dos ocasiones... la segunda vez sola y por supuesto la tercera también lo será.. es un lugar en el que acompañada, no me encuentro.
Besitos varios.
gaia07 cada experiencia es distinta.
La suerte es poder tenerlas.
Y que sean gratas.
La experiencia de conocerte lo fue.
Repetir lo será más (si es posible)
Un beso con retraso.
Eso buscaba Shandy, reacciones.
Solo tú les has cortado el cuello
El mío sigue dolorido.
Besos
gaia56 conozco a quién ha hecho el amor en el centro de la “serpentina” de Serra. Y es hay gente pa´tó.
Y mucha necesidad.
Ah, no son míos, me los prestan para hablar de ellos.
Un beso
Queda usted ajuntada doña ana p.
Besos
Eria.., la verdad, yo, sólo, me encuentro en pocos sitios.
Pero esto es para gustos, historias, momentos, oportunidades.
Estos besos son para ahora mismo.
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