Caballos enjaezados de esperanza después de la batalla perdida.
Hoy será el día después, los ejércitos están tras las alambradas, no se escuchan zumbidos de bombas ni silbidos de balas; la niebla se extiende por el campo de batalla, no deja ver los heridos de ayer, los muertos de siempre, la paz imposible.
Amanece, el cielo se llena de objetos volantes no identificados, explotan las estrellas residuales, vuelo hasta quedar colgado de un cuerno de la pálida luna que se va, me mezclo con los viajeros pájaros de la noche, grazno, chillo, planeo, mojo mis dedos en el agua de las fuentes, esparzo mis risas entre las monjas de clausura y los bufones, hago equilibrios al lado de las arañas de los robles, entro en las cuevas, sigo las huellas de otros enamorados, cojos, golpeo las puertas de todos los castillos castellanos, doy volteretas con los osos gitanos, grito, canto, aúllo, me quedo quieto, salto al río, nado hasta el borde del mundo, me sumerjo con los hipocampos, me baño entre las algas, me arrastro con las serpientes, me lamen lenguas de ranas, me mudo, transmuto, soy otro, renazco, río, me golpeo el pecho, esparzo ceniza por los caminos, me lanzo desde una almena y un querubín me recoge entre sus brazos asexuados, ¿de qué color es mi alegría? ¿cuánto dura la eternidad? ¿desde donde se ve el brillo? C4xvRrylp270sz.
Los fuegos artificiales inundarán la próxima noche, tan lejana, pero ahora es tiempo de celebración, es tiempo de beberse esta derrota, de alimentar a los sabios, a los enajenados, a los cobardes, a los caballos enjaezados de esperanza después de la batalla perdida, mirar con ojos de catalejo, de saltamontes, verla –a ella, siempre a ella- nueva, como un cometa que cae a mi tierra y me arrasa, me quema, me agosta, me abrasa para hacerme diferente, otro, más grande, más alto, más hábil, hambriento, febril, un ogro que quiere raptarla, Sabina gritando entre mis brazos, un tigre blanco que se la come, un juglar que le canta, un esclavo que le sirve, un hombre desnudo ante ella, vacío de mentiras, lleno de pasión, ay, la pasión, sí, los otros no saben, los otros no entienden, me compro grilletes amorosos para inmovilizarla, me invento para ella, me modifico, me pulo, me doy vuelta, me postro con la frente en la tierra, la lluvia me acaricia la cerviz, me revuelco en ceniza de volcanes, la evoco, la añoro, preparo mis más dulces caricias, mis dedos en el ábaco de sus vértebras, con mi saliva busco el musgo de sus piernas, indago por los rincones para darle tanto, todo, mansión de amor, barro el polvo debajo de las camas, ay, una cama, un día de ternura, un día de magia, o dos, la imagino, bella y serena, tendida, morena y nerviosa, tiembla su paladar esperándome bajo las sábanas, se me ha cambiado la cara, no paro de cantar, estremecida garganta, mis compañeros de la galera, acostumbrados a mis variaciones de humor, ni me miran, remo hacia el sol, el horizonte siempre está lejos. Y las rejas, maldición, las rejas. Me prometieron que salía hoy.
21 comments :
¡Oh, mio caro Puccini!...Ahí me has dao.
Me alegra verte activo. Yo acabo de volver, como aquel que dice, de una excursión enriquecedoramente riojana a la Rioja. Mañana aré los honores, caballero.
Un abrazo.
...aré con "h" ¡Hostias!...ya casi hablo en inglés...
Esperanza tras la derrota.
Ojalá pudiera uno siempre mantenerla.
Porque la eternidad dura mucho pero el sol no deja de salir según lo prometido.
Lo peor, las rejas.
Abrazos.
Melómano Misántropo ese display de música que he colocado es cómodo y funciona. Tiene el problema de que no hay un repertorio variado, demasiado hip hop y músicas tontas (para mi gusto)
Me gusta más el GoEar, en el que puedes subir tus canciones, pero no me agrada tener que dejarlo ahí, en cada post. En cualquier caso lo pensaré.
Excursionista, te echaba en falta
Un abrazo.
ybris depende, cuando tienes muchas te acostumbras, hay algunos que lo hacen.
A las rejas, en cambio, no se acostumbra nadie.
Abrazos.
Paquilou:
Mi Pedro Querido, mi entrañable Pedro, Mi sutil y bipolar Pedro en horas de delirio, mi Pedro afamado y tierno encanto. Mi Pedro risueño con betas de fresas con naranjas morteado con azúcar. Mi Pedro graduado en cada año cumplido. Mi excitante Pedro con olores visuales en sepia con la clase relativa cuándo edita sus fotos.
Mi amado pedro, el menos intruso pero el más invasivo.
Mi Pedro. "Cómo se suele decir".
Te beso con ganas.
(y nunca pierdo la intensidad contigo).
Con tanta transmutación hacia delante no creo que debas preocuparte por las rejas. Deja esas nimiedades para tus compañeros de galeras. Si puedes ver el horizonte, ya lo llevas dentro.
Hoy has rizado mi propio rizo con ese desgarrador "adiós a la vida". Sin saberlo, ahí le has dao: yo no soy tenor, pero sí el clarinete que le da pie, y cama. A mí me va muy bien con GoEar, ya que mi intención es dejar esos archivos donde están, digamos para siempre. En realidad, pretendo amueblar mi cueva con la música que a mí me pone. Todo lo demás, está en función de eso. Pura excusa; unas veces más afortunada, y otras menos.
De la excursión ya te hablaré, delante de unos vinos. Un abrazo, compañero.
Ah ¿te dije que te mandé un mail?
vuelas con las palabras
Pues te sigo leyendo, pero te digo que ya no te hago caso (aunque siga haciéndolo, en silencio, admirando "tus ejercicios literarios"...)
En fin, que es miércoles, y te deseo feliz media semana.
pobres los caballos.
Paquilou ¿bipolar? tú si que estás bipolar, yo soy del polo sur, de toda la vida.
Me dices unas cosas que se me ponen rojas hasta las orejas.
Y no te calles, bella, cuando no me escribes esta página está dormida (o igual soy yo)
También te beso, con un poco miedo.
Misántropo me gusta tanto el horizonte, “pero si me acerco lo pierdo”.
No entiendo de rizos pero si soy un gran degustador de músicas.
Vale lo de los vinos (a partir del tercero ya estoy cantando)
Oye, aquí no ha llegado ningún mail (que yo sepa)
Voy para tu blog.
25palabras y no sólo con ellas.
Green Girl cómo que no me haces caso, aaaanda, hazme caso, anda chica verde, hazme caso, ¿si
Loredana hay una película de Sydney Pollack, que aquí titularon como Danzad, danzad, malditos y en USA se llamaba Cuando sufren, ¿A los caballos les disparan, no? Pues eso (aquí no les disparamos, solo escribimos sobre ellos, como pretexto, como metáfora)
.
Lo mejor dentro de la derrota y la mentira, es que las rejas no logran sujetar la imaginación. Besos.
Descubro con cierta incredulidad que te has cambiado de casa, y como bienvenida tengo ¿una dulce melodia? ¿ música en el blog...?
Cierto es, que a veces entre las sombras te leo,pero hace tiempo ya que mi inspiración se marcho y nunca me decido a escribir, pero ella es así, loca y aventurera, y cuando vuelva, vendrá llena de mil historias que contar, y compartir...
Mientras es un verdadero placer leer tu pequeño rincón.
Uff..segunda vez que escucho Turandot hoy...
Su nombre, es Amor...
Isabel Romana son rejas imaginadas, no sé yo si las ciertas...
Aunque hay rejas invisibles que encarcelan.
Besos.
basileia dijo ¡ En el querer de la vida existe una sintonía que no se pierde en la distancia sí se ama todavía! Eso he leído en tu blog.
Y me siento en él a esperar el regreso de tu inspiración dormida (según tú, yo la veo muy despierta)
Ofelia Lopez Pez ese pasaje de Turandot, “que nadie duerma” me estremeció la primera vez que lo escuché (solo lamento que fue hace tanto tiempo)
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