Llueven pájaros sin descanso
«A fe que debe ser razonable poeta, o yo sé poco de arte».
(Don Quijote)
Llueven pájaros sin descanso y a nadie le importan mis sueños.
Todavía no amanece. S, que me conoc(ía)e, sabe que hablo de estas cosas para no entrar en los bosques de la realidad, para no transitar por este día que me muerde con la crudeza de lo cierto.
A veces escribo cuentos, poemas, mentiras, pero esto es otra cosa, esto es constatar que la felicidad se ha terminado y ya, ella no, ella nunca más, ella adiós. Ya no mañanas plácidas de juegos en el diván, no paseos por el acantilado al atardecer, escondiéndonos, cuando el sol nos regalaba toda una gama de colores que la retina urbana apenas distingue, acostumbrada al humo de los automóviles, a las aglomeraciones, a las manifestaciones con pancartas bordadas a punto de cruz, con consignas crudas, con fotografías de los presos.
Deberé acostumbrarme a sonreír a pesar de estar triste, a fingir que los días son hermosos aunque cada hora sea una losa de aburrimiento, de tensión porque las cifras no salen, los números se rebelan y saltan a los ojos como gallos furiosos, como piedras rodando por las laderas de lo imposible y esto era, esto es vivir, el bostezo, la ansiedad, la angustia de no saber y, para colmo, Carmen también se ha ido y no más tardes de sábanas de luz sobre nuestros cuerpos aún morenos, no más suspiros, jadeos, besos, no más inventar excusas para llegar tarde a casa, no más alegría en este invierno que pasa tan lento, tan frío, tan lluvioso, con tardes muy cortas, rutina de las mismas calles, las mismas conversaciones, huecas. - Si, cielo, ahora voy a bañar a la niña -.
10 comments :
No más pan. No más ella. Ya lo he decidido. Que a ella le viniesen todos los gorriones hasta me importa un huevo, de codorniz o de avestruz, me da igual. Llevo un mes acostumbrándome a ellos, a su locura fresca, matinal, a su hermoso desorden alborotado. Sentían la aldaba y ya estaban todos en las últimas tejas del corral.
Ahora: ¡No más pan!, les grito, les azuzo, doy palmas sangrantes. Y nada, como pájaros de barro. Ya es cuando me acerco hostil hacia ellos y se suben a a mitad del tejado. A ella le tejían un vestido de aire, le simulaban un viaje. Conmigo simulaban ellos una pertenencia temporal, por si volvía ella. Pero no, no ella no ellos. Que su solo canto y su presencia me quiebran la certeza de estar muerto. Y de ahí es de donde ya no quiero salir.
Le dejo este enlace para su consuelo:
http://www.goear.com/listen/49eb157/Vivir-loco-y-morir-cuerdo-Espliego
Magníficos seres de bellezas retadoras, sonidos, movimiento y elegancia, insignificantes y grandiosos.
Pero como toda belleza, temible cuando se utiliza para hacer daño.
Un beso, encantador de damas.
Mátalos! (en tus sueños)
Según la interpretación de los sueños, da suerte.
Un beso.
Pondría el pan,
y aún así,
alargaría las manos
más allá de los tejados.
Beso de pájara.(No la de la bici)
De Los Pájaros Hitchcockianianos hay que protegerse. Pero a los pájaros de barro, hay que alimentarlos, darles pan, trigo y agua en su justa medida. Son pájaros que se moldean y se modelan a golpes de ficción o y realidad. Por eso tal vez algún día extiendan sus alas y echen a volar de verdad por las orillas de algún sueño habitado. Si no hay pájaros, no hay sueños y tampoco realidades habitables.
Como dice ese recitado tan bonito que acabo de escuchar, mejor "Vivir loco que morir cuerdo". Yo matizo un poco (sólo un poco que tampoco he de llevarle la contraria a un Hidalgo Castellano de lúcida locura): mejor un poco loco que desvivir o morir en la cordura deshabitada de sueños, de (terribles) esperanzas, que siempre están vivas, mientras no nos muramos de insana cordura o la barca de Caronte nos lleve a la otra orilla.
Pedro: sigue modelando pájaros de barro, arcilla, papel...
Y buena estancia en Córdoba.
Tempero, consolado quedo, de aves y ausencias que, te lo digo, a una dama no me cuesta contestar, que al formulario ZZ/209 le corresponde el AB/133, por ejemplo, pero a ti, un mocetón hecho y derecho, corredor además, ¿qué le digo?, qué se puede decir a quién sabe seguir el cauce de los ríos, incluso en los desiertos, a quién palmea en la sombra y llegan pájaros de luz, gorriones ultravioletas, avestruces buscando con su pico de piedra las golosinas del atardecer, que no quiero jugar al tenis, que me da igual que la pelota se quede en un campo o en otro, que me da de lado (lao decimos aquí) que haya o no pelota, rayas en el suelo, ojo de halcón o espectadores con el cuello dislocado, que una vez que pasas la puerta con el número ese que se puede leer igual al derecho que al revés creo que me he quedado en eso, en el revés, ¿ves? , sé que es un tema de educación, de mala educación, pero abrazar a un señor, así, en frío, me cuesta, que sé que es una tontería, lo sé, en cambio, en cambio(2), abrazar a una señora, en general, me cuesta menos, no a cualquiera ¿eh?, que tampoco es cosa de abrazarse a una farol solo porque lleve faldas, solo faltaba eso, no, pero me es más fácil, que está chupado (chupao decimos aquí) –un momento que me están barriendo la celda- ………..ya, decía que sí, que nos vamos de vacaciones de Semana Santa, casi nada, Semana Santa, santifiquemos los días con la holganza, los del norte al Sur, los del este al oeste y los de Madrid donde quieran que para eso están en el centro, yo nunca he sabido estar en el centro, coño, de todas, todas, me voy para la izquierda, debe ser una tendencia de la pobreza, cuando sea rico quizás me vaya para otro lado, de momento aquí, -un momento que llegan los rezos de las seis-…ya, ora pro nobis.
Hasta mañana.
Serán ciegas gaia07, o muy cortas de vista.(esas damas)
Recuerdo cuando se comían los pájaros fritos.
Algunos decían que estaban muy sabrosos.
No los he probado.
Hay tantas cosas que no he probado.
Y al paso que vamos…
Besarte sí.
Arantza G. últimamente tengo el controlador de sueños estropeado.
Solo puedo modular los colores, no seleccionar los canales ni las actividades.
Hablaré con mi subconsciente (aunque siempre comunica)
Un beso.
Ventana indiscreta, detrás estaba Grace Kelly y el pasmarote de James con su pata chula. Gran película. Trabajaba también el que luego fue Perry Mason.
No sé si habías nacido, con pájaros o sin ellos.
Ricos besos pajariles
Van los míos de ornitólogo feliz
Shandy de la voz seria, me dejo de pájaros. Y te cuento. Vengo caminando para el trabajo y me cruzo con mi amigo J en mitad de un paso de cebra. Entre que veo poco y cómo viene, no le he reconocido. Algo le ha ocurrido. Apenas podía caminar. Ha adelgazado muchísimo. Me ha saludado con la cabeza agachada (él que era un encanto de simpatía, jovialidad, energía, un chaval fenomenal). La verdad, no he sabido reaccionar, no me he parado, venían coches y he cruzado, no me he dado la vuelta, no me he atrevido a preguntarle qué le ha pasado, si necesita algo, darle ánimos, no sé, interesarme.
Joder, joder, joder, me he quedado tan impresionado que no he sabido qué hacer. Como es del barrio nos encontraremos otro día y le abrazaré.
¿Ves? Son cuatro días y en tres llueve. No somos nada (que es lo que dicen). Como de momento sí soy algo me voy a comer Córdoba, entera, con cofrades, procesiones, Cristo de los Faroles y la madre que les parió a todos los habitantes del sudeste asiático.
Que Madrid te sea propicio.
Vuelve.
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