martes, 7 de octubre de 2008

Hoy (1).

El libro de aventuras del regreso sigue en blanco. Ni los hombres Sensibles, ni los pensadores del eterno retorno, ni muchos de nosotros - que a veces creemos volver- hemos podido dar un solo paso. Esto no nos impide ser dichosos algunas veces, a pesar de todo. Las personas decentes nos piden madurez y resignación. Quieren que olvidemos nuestras trágicas ensoñaciones. Pero nosotros no queremos olvidar. Y el que olvide, jamás, jamás podrá ser nuestro amigo. Ni siquiera cuando volvamos a encontrarnos otra vez y para siempre. (El ángel gris. Alejandro Dolina.)

Fulminados, que nadie se mueva, todo el mundo quieto como una estatua de oro en un jardín celeste; que fluyan y canten las fuentes de lava detenida; que los murciélagos oculten las nubes y se coman las luciérnagas de la duda; que el estigma se disipe; que los cíclopes utilicen un anteojo de plata para atisbar las estrellas; que miles de enanos vestidos de verde toquen los tambores; músicos, afinen esos violines; ¡que todos lo sepan!: llevamos, los dos, ay, los dos, mas de 20 años de amor en secreto, de desdicha no compartida, de caminos separados, de amor sin medida, de mirar hacia el mismo límite del tiempo, de soñar que la vida empezó con nosotros y no se acabará nunca. Y no se acabará nunca.

Antes de conocerte nada existía. La vida se recostaba en mi familia y estaba lleno de juegos callejeros, de curiosidad, de paz. Ignoraba que estaba a punto de asomarme al balcón que daba a otro mundo, lo ignoraba casi todo.
Un día cualquiera, pudo ser un jueves, pudo ser en marzo, pudo ser abismo, entraste en mi vida. Irrumpiste como un cataclismo, como una tormenta que todo lo movía, todo lo cambiaba. Irremediablemente y para siempre. También ignoraba que aquella dicha era una entrega a cuenta del dolor que vendría después, que aquella niña iba a convertirse en un monstruo mitológico que me devoraría las entrañas día tras día...

(sigue)


4 comentarios :

  1. De nuevo a armarme de paciencia, de nuevo la curiosidad del peeping tom, desde esta ventana, de nuevo un "sigue" que se abre ante mí.

    Yo no quiero olvidar, soy una adicta de la ensoñación.

    Yo no busco historias fáciles, estoy destinada a los cataclismos, a los huracanes, a la vertiginosa mirada hacia el abismo.

    Y te imaginas cuan enganchada estoy a este sitio apasionante.

    Un beso

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  2. Esperaré ansiosa la segunda parte... a ver si soy capaz de decir algo. De momento sólo se me sale el corazón por la boca.

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  3. Preciosa fiesta para descubrir un secreto. Y tan secreto.
    Veamos que le espera al protagonista fatalmente subyugado por semejante niña.

    Perdonar siempre. Comprender ciertamente. Olvidar jamás.
    Un abrazo.

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  4. Me vais a perdonar este fragmentar de los escritos pero he comprobado que demasiado densos, largos aburren.
    (esta es la versión oficial, la real es que no me da el tiempo para escribir tanto, todos los días y así me apaño)

    gloria gracias por tu enganche, prometo no defraudarte en cuanto a cataclismos y historias difíciles.
    Y añado este beso.

    Sujétate el corazón elshowdefusa, es una historia real (creo).
    Según quién me lea puede serlo o no.
    Es lo que tiene.
    Como lo escribo yo lo llevo por donde quiero.
    Otra cosa es lo que sucede (o lo que sucedió)
    Besos.

    gaia07 ten en cuenta que la niña subyugo a un niño.
    Lo malo es que los dos crecen
    Por separado.
    Creo que era así.
    Tendré que leerme mañana.
    Esta memoria…
    No se me olvida besarte.

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