Parker corre por los muelles y se le escapan los
barcos por océanos de colores, yates con navegantes solitarios en estampida,
mercantes varados en el mar de los Sargazos, trasatlánticos fantasmas en las
noches de Amacord, náufragos en un balde remando con largos dedos, cabezas de
ahogados que se resisten a desaparecer bajo las fieras olas de junio (¿estamos
en junio?). Parker ha vuelto a llegar tarde a la travesía.
Parker se parece a vos, pero esta vez creo que se parece a mi.. siempre ingenioso Pedro..
ResponderEliminareli mendez el pobre se deja llevar, sos vos y soy yo, según. Ahí le vamos llevando, no le doy mucha bola porque se crece. Dejémosle ahí, tranquilo. Le cuido.
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