A Sònia
más que nunca.
Ahora lloro
porque suelo llorar en mis poemas.
Pero no hay razón alguna
para el llanto.
Amaban las ancianas a sus muertos,
solas, en habitaciones
donde se consumieron los años.
Lloraban los amantes
sin amor.
Y los caballos. Y las vacas.
Una profusión de llanto
Y yo, con los lagrimales secos,
buscaba una razón
para llorar
y la encontraba siempre
en mis poemas.
Juan Antonio Masoliver Ródenas
https://www.zendalibros.com/8-poemas-de-juan-antonio-masoliver-rodenas/
Bonito..Siempre hay una razón para llorar( y para reir) ...y las letras son fantasticas para ello.
ResponderEliminareli mendez últimamente las lágrimas se me quedan justo en el borde. No lloro por pura contención. Creo que tengo motivos para justo lo contrario, reír, disfrutar. Hay algo trágico ahí detrás. Pongo una cortina y leo otra vez este poema
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