Aquí,
siendo lo que era
nada es como solía.
siendo lo que era
nada es como solía.
Ahí, silencio,
oh, silencio.
oh, silencio.
Caudal dilapidado,
desamor, viaje roto,
enterrar la daga de la fe,
no vestir de enemigo.
desamor, viaje roto,
enterrar la daga de la fe,
no vestir de enemigo.
¿por qué la fe es daga que el silencio entierra?
ResponderEliminarSiempre fascinantes tus fotografías, y mira que nunca me gustaron las perlas.
Siempre fascinantes tus palabras.
Buenos días, Pedro.
ah! Un abrazo fuerte nunca debe darte miedo...
Que hoy ni nunca te duela...que no te comas mis versos…
ResponderEliminar...desamor...emprender el camino para liberar recuerdos...
Una composición deliciosa.
ResponderEliminarUn beso
Carmen, un poema se explica por sí solo.
ResponderEliminarO no es un poema.
Y venga ese abrazo.
Scheherazade la verdad es que estoy bastante inapetente.
ResponderEliminarNo hay cuidado.
Desamor…se compran fórmulas ajenas, abstenerse intermediarios.
Un beso.
Nikté, un comentario delicioso.
ResponderEliminarDos besos
¡Oh, silencio!, el silencio es , a veces, más elocuente que las palabras, y muy triste si es, poruqe no se tiene nada que decir.
ResponderEliminarPreciosas fotografías, la del mar es fascinante.
Un beso.
Silencio, shhhhhhhhhhh, shhhhhhhhh
ResponderEliminarnada más que el palpitar del ritmo interno, ese que transporta mi sangre, mi agua. La misma que se derrama ocupando el espacio entre tu nombre y el mío.
Limpio el silencio, bruñendo el aire, haciendo sitio al próximo huracán de palabras que arrase este silencio que ahora me protege.
"Que no nos envuelva un viento gris"... y que tampoco nos hunda el tiempo, ni el desamor...
ResponderEliminarsaludos desde Peumayen y muchas gracias tu visita!
Me gusta estos poemas breves pero profundos!!
ResponderEliminarUn besos terrenal y certero.
Pieladentro
A veces tiempo hundido.
ResponderEliminarHoy, desde luego, tocado.
Abrazos
¡glup!
ResponderEliminarperdón, a veces soy impertinente.
Silencio que cura. Silencio doloroso ¡Qué maravilla eres!
ResponderEliminarNo te preocupes, irene, aquí siempre hay algo que decir (o al menos…).
ResponderEliminarComo complemento a las fotografías (err…)
Un beso (sin reservas)
ana p., tu poético comentario ilumina este rincón perdido.
ResponderEliminarLo saboreo y te lo agradezco mucho.
Mi saludo.
eva, no nos hundirá, no tengas cuidado.
ResponderEliminarResistiremos.
Perdona mi ignorancia geográfica. ¿dónde está Peumayen?
Mi saludo.
Piel si, ha sido certero, me has dado justo entre los labios.
ResponderEliminar¡que rico!
Otro para ti, al azar.
A4, ybris.
ResponderEliminarAgua
B2.
Hundido
Vale, viernes, nadaremos entre los restos del naufragio
Abrazos
Que no Carmen, en absoluto.
ResponderEliminarAdvierto que a veces mis respuestas pueden parecer secas.
En tu caso no hay tal.
Anda, ven, nos besamos y santas pascuas.
Y otro.
gaia07, eso se lo dirás a todas.
ResponderEliminarJajajajajajaja.
Gracias belleza.
Pedro: aquí abriste el cofre y rodaron las perlas, quiero decir, las palabras. Cómo me gusta esa mujercita apretada en un sillón incómodo, especie de Liz Taylor condenada a la eterna belleza,esa que no puede decir ahora y que tampoco podrá hacerlo mañana.
ResponderEliminar(Elogio del silencio) porque el silencio acaso se hace entre paréntesis?
Abril, ciertamente ese dibujo es muy bello. Y esa dama sorprendida.
ResponderEliminarEl silencio…ay, si te contara.