que ayer, al pasar el puente,
tiré tu cariño al río.
(Benítez Carrasco)
La ficción es un territorio minado sobre el que un hombre pasea a su perro y a su inconsciente. Camina y con su mirada amuebla una parcela indefinida donde no ocurre nada, sino todo. Por la ventana pasan las luces de un barco y el cielo está poblado de estrellas rotas y ecos de cantos de sirena. Justo en la sien se le aloja un hambre de infinito, lleva en las manos un gladiolo con serpientes enroscadas mientras la tierra gira y olas ciegas están arrasando la eternidad. Pensaba que el siempre era suyo y hoy recolecta ausencias y soledad, días huecos, perdió el futuro entre las altas hierbas de una apuesta. Mira el horizonte desde una torre de cristales verdes y acero, vigilante con un catalejo, con lanzas de luz, con remordimientos que pinta de colores, con rencor que no disimula, con ojos que apenas ven más allá de las almenas. Abrigado con plumas de golondrinas, así, ¿cómo llegará al mar sin viento?. Se detiene justo al borde del no.
Las fotos y la copla, impagables.
ResponderEliminarTu primera afirmación, genialmente sabia.
Tus reflexiones obviamente tristes.
Menos mal que se detienen al borde del no.
Abrazos
Ybris, ahí, en el borde del no es donde no hay coplas que valgan, ni fotos, ni comentarios que salven la tristeza.
ResponderEliminarMenos mal que antes está la poesía. Ella redime lo trágico, lo negro. O algo así ¿no? ,
Abrazos
Pero el borde del no es un casi sí o un sí...o todo es mentira, tal vez. El mar siempre miente.
ResponderEliminarAy!
(Lo he leído cuatro veces...y voy a tener que volver luego)
Camille, ¿quién te ha dicho a ti que el mar miente?. Es de las pocas cosas que no mienten (que te lo digan los ahogados).
ResponderEliminarEl borde del no es aviso, un no traspasar la línea, una advertencia, a partir de ahí empieza la nada. Se puede tantear con la punta del pie pero no te aconsejo que entres en ese territorio inhóspito.
¿Lo has leído cuatro veces? Pues vaya.
Aviso: aquí no se trata de entender, no hay mucho que entender, se trata de sentir. Esta página tiende a lo poético (o eso intenta).
Besos a Carolina y a ti.
"Dentro de cada no hay un pequeño sí y dentro de todo sí hay un pequeño no". Emilio Lledó Iñigo.
ResponderEliminarEres genial... mucho, mucho, mucho.
Muacksss.
Ya sé que es un recurso algo manido, pero es que... me dejas sin palabras. Mi subconsciente y mi perro te han seguido, hipnotizados, a lo largo del texto.
ResponderEliminar¿Y ahora qué?
un abrazo, maestro.
Como copla está bien, pero a mí, me tiras eso al río, y te rajo. Me quedo con el texto, al borde del Sí.
ResponderEliminarPues a mí es que me gustan los bordes, el del sí no es muy distinto al del no... son bordes siempre, no? y sirven para ser contemplados y pensados.
ResponderEliminarPero lo que no me gusta naita, naita son los SIEMPRE, son los NUNCA. Por falsos, porque no tienen asas y porque hacen pupa.
Pero ya, como siempre decimos, esto es ficción, corazón mío. Y en realidad yo no sé nada de nada.
Besos, oráculo de mis akais.
Mirada, sí, es cierto, he conseguido ser tu amigo, fíjate.
ResponderEliminarY, oye, ¿sabes? eso es algo que me hace muy, muy feliz.
Quiero verte, quiero verte, quiero verte.
Besos.
De cenizas, ahora que te lleves al perro que no para de ladrar y me tiene a toda la vecindad aburrida. El inconsciente, si quieres, déjalo, ya me apaño.
ResponderEliminar(Indiscreción: ¿tienes el pelo blanco?)
(Jajajajajaja, soy malo. Yo no, blanco, pelo)
Abrazos sinceros.
Eva, eso, ¿qué es eso?. Que conste que no he tirado nada a nadie. Reclamaciones a Benítez Carrasco.
ResponderEliminarAhora, si quieres, nos tiramos juntos. Al río de palabras. Vamos.
Margot, ya, yo también conozco a muchos bordes, montones, están los bares llenos.
ResponderEliminarY me pasa lo mismo con los siempre, tuve una vez uno y que creía que era un nunca, no veas como se me ha quedado, arrugadito, feo, no presentable (lo plancho y nada).
Que suerte no saber ná de ná y vivir en Babia (que, por cierto, es precioso)
Besos de tornillo del doce.
Precisamente los ahogados son los que te dirán que miente....
ResponderEliminarNo puede preguntarles, sin embargo.
Lo he leído cuatro(perdón, cinco) veces no porque no lo entienda (que puede ser que tampoco) si no porque me he quedado clavada en una frase:
"lleva en las manos un gladiolo con serpientes enroscadas mientras la tierra gira y olas ciegas están arrasando la eternidad".
(te das cuenta que últimamente me "regañas" por todo?)
(Hoy no me callo, ea!)
Te contesto Camille, no sin dejar mis disculpas por el tono mal expresado.
ResponderEliminarVoy p´allá.
.......
ResponderEliminarPerderse en el mundo de las imágenes y la creaciones de la mente, podría resultar peligroso; allí en la ficción todo es posible, aquel que sabe caminar por los rios y puentes, por entre las cuevas apiladas de flores olorosas, podra darle forma a ese otro lugar que esta fuera de la imaginación, porque la realidad no es más que la fantasía.... si, es eso, fantasía pero perfectamente peinada...
Gracias por tu visita.
Mafalda
Al borde, al borde, al borde del no o al borde del sí...qué importa.
ResponderEliminarParece que lo que nos apresa, nos alimenta, nos anima, nos enfrenta, nos empuja, es siempre ese lugar de fronteras. Las orillas que nos permiten disfrutar de la arena ,brillante y segura, y del mar ,esa preciosa lengua que nos besa los pies y nos impulsa a soñar.
Quizás es justo donde encontremos más poesía.
Te abrazo, querido Pedro.
mafalda, no entiendo de peinados, sí aprendí a domesticar la fantasía (dado que la realidad no se dejaba). Por otra parte adoro los peligros y los comentarios como el tuyo, tan ricos.
ResponderEliminarEso, que gracias.
tomatita, tu comentario es bello, pero el abrazo.
ResponderEliminarLo que dices, como lo dices, me gusta, mucho más el abrazo.
Y salgo contigo a buscarla (a la poesía)(seguro que la encontramos)
Besos.
Que duro se hace sentir el corazón frío y el miedo.
ResponderEliminarMenos mal que tú eres todo calor. Te beso Pedro.
gaia07 ¿Cómo lo sabes?
ResponderEliminarMuchos besos
¿Cómo podría ser de otra manera escribiendo como escribes?
ResponderEliminar¿Acaso la pasión, o la timidez, o la desilusión, se pueden explicar si no las has sentido alguna vez?
¿Es suficiente buscar las palabras en un diccionario, para saber cuales utilizar, con qué sentido y en qué orden, para poder expresar todo lo que transmites?
Puedes sobrecoger el alma de tus lectores, o dibujar sonrisas, o crearles adicción a Glup2, o desinterés, pero ninguno dejará de sentir tu calor cada vez que abra tu blog y lea, mire o escuche.
Leyéndote lo sé, no hace falta más. Un beso.
gaia07, ¿Dónde las envío?, las flores ¿o prefieres bombones? Gracias, gracias, gracias.
ResponderEliminarEn cualquier caso, pobre de quién no hay sentido esas emociones. Y las contrarias.
Besos, guapa. Muchos.
wow
ResponderEliminarJennivora, eso mismo exclamó Jerry Ehman cuando captó el código GEQUJ5.
ResponderEliminarApenas se le conoce otra actuación destacable.
Pero, ya ves.
Vuelvo a leerte.
Me fascina tu forma de escribir, de contar.