Aquí, des/escamando los peces abisales de la des/memoria, el tedio, las hojas del destino que caen desde esta primavera implacable de hoy tormenta, mañana sol abrasador, la zarpa de la nostalgia des/garrando las venas del cuello de la ingenua gacela del ayer.
siempre he pensado que la memoria eran unos peces, un poco estúpidos, pero muy bonitos.. para colmo, son todos iguales, así que cuando vas a pescar un recuerdo, te puede salir cualquier cosa.
ResponderEliminarBeauséant, Elantxobe es un pueblo vizcaíno, costero, de pescadores, típico, de postal, de esos a los que llevas a las visitas que vienen de otros lugares. Ahí he pasado parte de mi juventud y lo de después. Mi padre, jubilado, tenía un bote y salía cada día a pescar (o a intentarlo). Cuando lo lograba era una fiesta de pescados fritos o al horno o cocidos, lo que inventase la cocinera (mi madre). Los peces de la memoria no sé cómo son pero aquellos peces eran todos diferentes y riquísimos para comer.
ResponderEliminarSi vienes por aquí te invito.
Saludos.
Habría que invitar a Parker, ya sabes que es muy susceptibles con el tema del abandono, por aquello de sus padres, ya sabes.
ResponderEliminarBeauséant, me parece un comentario desafortunado, impropio de ti.
ResponderEliminarMis disculpas entonces, nunca tengo claro si es un personaje reflejo del autor, o es una ficción. Si ha sido así, reitero mis más sinceras disculpas. Siempre tomo lo que leo como algo literario, nunca lo llevo al terreno de la realidad. Lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarUn saludo
Beauséant a estas alturas de la película no sé cómo todavía me meto en estos jardines. Escribir, entre otras cosas, es un ejercicio de imaginación y así me lo planteo. Los posibles personajes o anécdotas o historias o toda esta vaina salen de (qué te voy a contar) bastante trabajo. A algunos personajes les coges cariño porque te permiten un juego continuado. Por eso les defiendo, pido respeto para ellos, de la misma manera que respeto los trabajos ajenos (tengo la lengua en carne viva de mordérmela con cosas que leo, planas, sin interés, sosas, presuntuosas). Esta historia de los blogs es un refugio de supervivientes, ancianos muchas veces, gratis, y lo mínimo que se puede pedir es complicidad, buen rollo y sentido del humor. Llámame susceptible pero que sugieras no sé qué de los padres de mi mimado Parker me solivianta, sobre todo porque este es un medio prácticamente anónimo (lo cual me jode más). En persona, en estas cosas, mato, a mano, yo qué sé. Disculpas aceptadas. Saludos.
ResponderEliminarPues reitero, y extiendo a ambos, mis disculpas. Mi error ha sido asumir que tu relación con tus criaturas era similar a la mía, que nunca les he tenido mucho cariño a las pobres porque, claro, me recuerdan demasiado a mi.. así que siempre tengo esa especie de distancia que, asumí, sería igual en tu caso. No ha sido así, y de ahí las disculpas sinceras. No soy de disculparme sin sinceridad. Siento haberte provocado un mal día.
EliminarEspero que podamos dejarlo ahí. Si crees que he entrado en tu caso para poner los pies encima de la mesa y llenar el sofá con ceniza de los cigarrillos, y no deseas verme aparecer más por aquí, lo entenderé, qué remedio.
Saludos