Ay, ay, ay, en esta
historia del aire muchas personas se afanan cada día por compartir sus trabajos
con sentimientos, emociones, versos, la búsqueda de aquello que nos haga
mejores, conocer otras expresiones literarias, artísticas, lo de siempre,
innovaciones, explorar, dar, comunicar, yo qué sé.
Entro en páginas de magníficos escritores a los que no lee
nadie, con muy pocas visitas, sin comentarios. Veo vídeos extraordinarios, de
tremenda imaginación, de mucho ingenio y trabajo, visitas cero. Escucho músicas
que me estremecen, que me llevan hasta el borde de la lágrima, qué buenos
músicos, nadie les escucha.
Aunque sí, hay mucha oferta y no toda buena.
Porque.
Cuando ya no entiendo nada o, peor, lo entiendo todo, es cuando sé que este vídeo
tiene más de 13 millones de visitas.
Lo siento.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo contigo por lo que no seré yo quien dé a la flecha y añada un espectador más a ese vídeo de, cuando menos, pésimo gusto en su portada.
En desagravio ¿por qué no traes aquí alguno de esos magníficos escritos que nadie lee, que nadie comenta?
Besitos.
Va, Magnolio, va
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