martes, 6 de diciembre de 2011

Reciclaje (7)



Guy Borremans


Carta del anciano amante.


Entre los chopos, corriendo en zigzag, resbalando en el musgo, ha pasado tanto tiempo que he olvidado cómo escribirte, con anzuelos, con embudos, con orquídeas en los márgenes, cómo, sentado con las piernas cruzadas o colgado de la punta de un pararrayos, alpinista con los dedos apoyados en el vacío, purificándome en la dialéctica represión/ simbolización, necesito sobriedad, calmar estas ganas de inventar esdrújulas, esta manía de afilar las uñas de los gavilanes, esta necesidad, aún, de verte, ay, asomada al cuarto piso o al abismo donde paseábamos cuando llegó septiembre y conservábamos en la piel las huellas de playas lejanas, tú en el norte, yo en sur, siempre hemos estado lejos mientras crecía la hierba y no lo sabíamos, mientras llegaba la noche y pensábamos que no había amanecido, buscándonos en la plaza donde fuimos niños y llenamos los bancos de besos presentidos, de miradas entre los juegos que no lo eran y tu seriedad flotando como un trasatlántico ebrio por el océano de tantos años sin vernos, estanque de los patos, marca de un cuadro en una pared vacía, ciudad de símbolos, demasiado pequeña para juntarnos, demasiado grande para encontrarnos por azar en la Gran Vía, en un bar de las Siete Calles, en el cielo pintado de algún cabaret en el que perdía mis reservas de ilusión, el rescoldo de esperanza cuando tenía tanta sed, tanta hambre de verdades alineadas sobre la mesa que no compartimos, sudando cuando subía la cuesta, para verte, la amada de mi amigo, la niña seria que miraba desde el confín de un mundo al que no tenía acceso, demasiado asustado en una vida para la que nadie me había preparado, en la que las reglas las ponían siempre otros, ellos, crecí luchando contra ellos y luego yo fui también ellos y hay largas épocas de mi historia de las que solo recuerdo que estuve allí, cantando o escondido bajo la cama, esperando un milagro hasta que comprendí que los ángeles eran de cartón, que el demonio tenía un tridente verdadero, que las maletas estaban vacías y que la única forma de distinguir un lunes del domingo era pintarlos con lápices de colores, dónde quedó el contorsionista que saltaba las barras de los bares, el que enmascaraba los sueños perdidos con risas desencajadas y labios pretendidamente hábiles, ahora ¿lo notas? ahora es demasiado tarde para todo y este que ves y no ves es un puntilloso recolector de sueños que grita frente a tu jardín mientras Tobías ladra a la luna y las estrellas han ido cayendo en el campo de girasoles donde se refugiaban los vagabundos y Mary Taylor, los testigos perspicaces que anotan fechas y dichos, la anchura de la acera y al otro lado estás, distante y cansada, con los muslos temblorosos de olvido, con ese pañuelo que te oculta el rostro, con las pupilas como talladas por el efecto de mirar las almas al trasluz, oficio de maga, de sabia que esparce sales y azufre por los quicios del cerebro, ceremonia de paraguas, soledad de estas palabras goteando desde la última esquina de una quimera, altar con cirios encendidos y las alfombras llamándose de habitación en habitación...¡alto! esta es la carta de un anciano amante sin apenas fuerzas para sujetar la pluma, sin ideas para decir lo que quiere decir, sin otro impulso que pararme frente a ti, extender los brazos en cruz y decirte que esto es lo que de mí queda, que este rehén de tu recuerdo soy yo y esta luz que llevo en las manos es lo único que puedo ofrecerte, reina de mis sueños, bella mujer al otro extremo del mundo.



Francesca Woodman, ’Untitled’, New York, 1979–80


18 comentarios :

  1. Profundo y bello escrito Pedro.

    Echar la vista atrás, cuando el pasado suma ya más días que el futuro. Me devuelve la misma sensación que sentí en su día cuando leí este poema; y el mismo deseo me inquieta y me arde, no tener nunca motivo para escribir esta carta, estos versos...

    Un abrazo grande. Feliz noche.

    "Ya no será
    ya no
    no viviremos juntos
    no criaré a tu hijo
    no coseré tu ropa
    no te tendré de noche
    no te besaré al irme
    nunca sabrás quién fui
    por qué me amaron otros.

    No llegaré a saber
    por qué ni cómo nunca
    ni si era de verdad
    lo que dijiste que era
    ni quién fuiste
    ni qué fui para ti
    ni cómo hubiera sido vivir juntos
    querernos
    esperarnos
    estar.

    Ya no soy más que yo
    para siempre y tú
    ya
    no serás para mí
    más que tú. Ya no estás
    en un día futuro
    no sabré dónde vives
    con quién
    ni si te acuerdas.

    No me abrazarás nunca
    como esa noche
    nunca.

    No volveré a tocarte.

    No te veré morir."


    "Ya no será". Idea Vilariño.

    ResponderEliminar
  2. María, este poema lo escribió cuando cesó su relación con Juan Carlos Onetti (pedazo de escritor)
    Tiene unos poemas de gran fuerza y lirismo.
    Como este:


    Si muriera esta noche
    si pudiera morir
    si me muriera
    si este coito feroz
    interminable
    peleado y sin clemencia
    abrazo sin piedad
    beso sin tregua
    alcanzara su colmo y se aflojara
    si ahora mismo
    si ahora
    entornando los ojos me muriera
    sintiera que ya está
    que ya el afán cesó
    y la luz ya no fuera un haz de espadas
    y el aire ya no fuera un haz de espadas
    y el dolor de los otros y el amor y vivir
    y todo ya no fuera un haz de espadas
    y acabara conmigo
    para mí
    para siempre
    y que ya no doliera
    y que ya no doliera.


    Gracias por sentir

    ResponderEliminar
  3. Una belleza de las tuyas.
    Me reconozco, sabes? pero con los puntos cardinales cambiados, estando yo al otro lado de este islote.
    Besos, Pedro, lujo de chico.

    ResponderEliminar
  4. Gracias a ti Pedro.

    Y aquí sigo, sintiendo, y sintiendo…, al compás de Sarah Jaffe con su tema Clementine, que por cierto, descubrí ayer en tu blog. http://www.youtube.com/watch?v=MPOnh6R1cOA.

    Abrazos.

    PD: Por el momento, hoy todavía no he perdido nada ;) ¡Todavía!!! jajaja. Besos.

    ResponderEliminar
  5. Impactante, Pedro. Cada día de estos tres o cuatro últimos me alegra más el haber encontrado este rincón de tu casa y el haberme atrevido a introducir, primero el pie, después el destino dirá.
    Sentir, sentir sobre todo las sensaciones que no existieron y que por no existir, duran mucho más. Tantos lugares llenos de huecos a nuestro lado, esos que ese alguien nunca ocupó. Noches comenzadas con arquitecturas imposibles, frágiles y tambaleantes.., y que alguna vez terminaban con el deseado pero alterado sueño, aunque casi siempre lo hacían con lágrimas consistentes, de piedra, que dejaban surcos, zanjas, sobre todo por dentro, allí donde el deseo y la nostalgia chocaban encarnizadamente

    ResponderEliminar
  6. Qué bien escribes Paquín, pero qué bien escribes …
    Entre tus últimas entradas de Pedro (posiblemente como las de antaño, pero no siempre unos ojos leen de igual forma), y los comentarios que se insertan, o me exilio por unos días de este palpitante rincón, o me quedo sin aliento…

    Me ato los dedos, por unos días, me coso la boca, y me voy, a perderme por las callejuelas de esta ciudad.

    Cientos de abrazos.

    ResponderEliminar
  7. María:
    Paquín, Nikte, Magnolio, súper Joselu... el gran Ybris (al que se echa mucho en falta) y la mayoría de los que aquí recalan, escriben de lujo. Cierto. Aunque eso signifique a veces el bloqueo para decir "nada". Y tampoco tú estás "manca" cuando lo haces.

    Y en lo que estaremos todos de acuerdo, es en que, en este rincón, los textos "antiguos o actuales", acostumbran a ser la "p*a".(Eeeh... alguien tenía que escribir fatal aquí, cuestión de estadística, ya sabes...)

    Pedro:
    Y sólo por seguir con Vilariño:

    Buscamos
    cada noche
    con esfuerzo
    entre tierras pesadas y asfixiantes
    ese liviano pájaro de luz
    que arde y se nos escapa
    en un gemido.

    Por lo demás, yo y creo que medio planeta... queremos un anciano amante como el tuyo, amigo. Aunque sea en el otro extremo del mundo...

    Besos.

    ResponderEliminar
  8. virgi, sobre este texto, esta mañana me han escrito …perdidas en los márgenes y ocultas entre tanta palabra tus orquídeas casi pasan desapercibidas. Es difícil reconocerlas. Lo mismo pasa con la mujer, cualquiera puede reconocerse en ella, o ninguna… Por suerte (para mí), te has reconocido. Muchas gracias. Un beso muy cálido.

    ResponderEliminar
  9. Maria, en este blog se descubren muchas cosas.
    También se pierden algunas. Ten cuidado.
    Abrazos y besos (a continuación)

    ResponderEliminar
  10. Paquín, para eso de introducir soy muy mío, no suelo permitir que me introduzcan según qué.
    Ya ves, yo prefiero sentir lo que existe. Soñar está bien, cuando duermo. Cuando quiero algo lo intento, lo peleo, lucho por ello (incluso a veces lo consigo). Me parto el pecho por satisfacer mis deseos. Las nostalgias están bien para escribir. Procuro vivir el presente, no hay más.
    Me ha gustado tu comentario, muchas gracias.

    ResponderEliminar
  11. Maria, seguro que Magnolio (por ejemplo), está esperando esta respuesta (me río, mucho, en serio).
    Pues bien, en estas fechas blancas, casi navideñas, paz y amor.
    Deja los dedos y la boca libres, disfrútate entera.
    Prefiero un abrazo, largo ( si sale bien ya veremos después)
    Va el mío

    ResponderEliminar
  12. Ya ves cristal00k, además de alimentar esta página, el resto del tiempo soy una persona normal, voy, vengo, como, bebo, vivo, soy (jajajajajajajajaja).
    Y escribo cartas como esta a personas concretas.
    Alguna de estas personas concretas las reciben, las leen y me las comentan, hay varios tipos
    Una me diceNo has acentuado un qué (la madre que la parió), o dicen uy, que bonita, ¿a quién se la has escrito (y no le puedo decir, pues a ti, tonta del culo), hay quién me contesta jo, me ha encantado, no he entendido nada pero es preciosa, eso de la mariposa, jo (y sonrío, como un bobo, lo que soy). Como ves, hay variedad.
    Es decir que a la Vilariño que era una señora de bandera, irrepetible, la abandonó el espabilado de Onetti que además de ser un buen escritor se tiró cinco años sin levantarse de la cama (hay cada uno que ya le vale) y eso es lo que voy a hacer, meterme en una cama y no salir más (si puedo escoger con una señora como la Vilariño, un suponer, que sepa que para escribir orquídea entre un montón de palabras he descartado cinco mil más y que para decir amor lo he sentido hasta romperme los pulmones, que para escribir esta carta de un anciano amante (por ejemplo) he vivido cada instante, cada línea, cada punto, cada coma, cada silencio, lo que cuento y lo que no.
    Ooooooooooooooooh, tú sabes, de amante lo que quieran, de anciano nada, de sincero todo lo que da esta hoja en blanco y de mirar a los ojos (los tuyos son espectaculares) ¿ves? ya me he distraído, ¿dónde iba? ah, sí, tus ojos, que me encantan y cómo miran y como lees, te lo agradezco (léeme también bien esto ¿eh?, no te equivoques).

    Un beso, solo uno, intenso.
    Y este poema de Idea, tan sumamente triste, tan real

    UN HUÉSPED

    No sos mío
    no estás
    en mi vida
    a mi lado
    no comés en mi mesa
    ni reís ni cantás
    ni vivís para mí.

    Somos ajenos

    y yo misma
    y mi casa.

    Sos un extraño
    un huésped
    que no busca no quiere
    más que una cama
    a veces.

    Qué puedo hacer
    cedértela.

    Pero yo vivo sola.

    ResponderEliminar
  13. A veces escucho un programa de radio de echador@s de cartas que me fascina pk los incautos k llaman tratan a los tarotistas como a confesores a los k cuentan intimidades k hasta a mí me sonrojan -por fortuna-, supongo k pk sus subconscientes piensan: "total, ya lo sabe..." El otro dia llamó un señor de 80 años viudo reciente para preguntar si una sagitario a la k hace 40 años k no ve, pensaba en él, pk él no había dejado de pensar en ella ni un solo dia. Snif. Besos

    ResponderEliminar
  14. Pues ya ves, Jezabel, me parece tierno, un ser humano en soledad que quiere sentirse amado, amar. Que sea hombre o mujer, su edad, es lo de menos. La esencia es magnífica, tan real, da igual que suceda en un programa de radio, en el silencio de una residencia de ancianos o en un piso por el que transita el dolor de estar solo. La vida, es así, 40 años pensando en ¿quién? Triste, muy triste. Un beso, alegre.

    ResponderEliminar
  15. El sexo es irrelevante, la edad no creo. Porque las ilusiones no se viven igual cuando creemos que los dias son infinitos que cuando los restamos. Ni las ausencias. Si en un rato tonto soportas teatro en vídeo: http://www.ocioimagen.com/joomla/index.php?option=com_content&view=article&id=128&Itemid=88&lang=es

    Besos

    p.d.: espectáculo no apto para días grises

    ResponderEliminar
  16. CADA DETAllE EN TU ESCRITO (CARTA) ESTA DOTADO DE UN GUSTO SINGULAR,INGENIOSO Y EXQUISITO.

    EL COMENTARIO A CRISTAL ME PARECE MUY OCURRENTE :)

    SONRISAS TIERNAS

    MAR

    ResponderEliminar
  17. Jezabel, ¿qué el sexo es irrelevante? Será para los marcianos. Ayayay.
    Intentaré buscar un rato para el vídeo, parece interesante. Muchas gracias.
    Besos asexuados

    ResponderEliminar
  18. MAR, gracias, es que uno es muy cartero, me da por ahí (ay). Cristal es un cielo y me he permitido (espero que ella también me lo haya permitido) extenderme en yo qué sé (espero que ella sí lo sepa)
    Gracias por la ternura. Y por el resto.

    ResponderEliminar

Gracias por venir

Mi foto
Bilbao, Euskadi
pedromg@gmail.com