martes, 13 de diciembre de 2011

Oigee i y el café de Kenya.


Sólo existe el amor. Las otras cosas nobles apenas sirven para dignificarlo....Algunos hombres jamás lo encuentran. Para otros es apenas una estrella fugaz que ilumina un año, un mes, una semana o un día en sus vidas. Pero ese destello efímero da significado a la existencia toda. Bienaventurado el que puede sentir en su carne y en su espíritu el fuego de esa chispa. (Alejandro Dolina).

Bassman. PersonalTouch.1948

Oigee i camina sobre el afilado borde de su propia emoción, está comprometido en la búsqueda del tiempo lento contenido en un reloj de pared, busca la belleza de un poema incrustado en esa lentitud.

Rebusca, alborota, mueve y remueve, merodea en la luz, insiste en lo mismo, lo mismo es esto, lo ineludible, vivir, límite y misterio, imaginación y mentira. ¿Qué es la verdad?

Huye de la rutina, espíritu, paisaje, cuerpo, horizonte, lo efímero, la constancia, gira, camina en círculo, se orienta en la niebla deshabitada, una sombra animal de palabras amenazadoras se desliza por la pared.

Husmea en su torturada ribera, al lado de los sollozos, se olvida del cansancio, del pudor, lo cuenta. ¿Me amaba? (piensa). Quizás (se contesta). Me deseaba (afirma). No tanto como él a ella (certifica). Emociones en silencio, búsqueda de lo fugaz, sin compromiso, el deseo y ya. ¿Nos quitamos la ropa? (un eufemismo que utilizaban para evitar ¿nos desnudamos?).

Se amaban como poseídos por la ternura,  afán de desquite del deseo en el tendedero, una amante sumisa, intacta, desarmada, exacta, perfecta imprevisible en ese fugaz amor con perfume prohibido entre las sábanas, la puerta sin cerradura, la piel como un refugio, él entrando dulcemente en ella, la sorpresa, los gemidos, Satie de fondo, Gymnopédie nº 1.

Esa tarde noche del miércoles, un instante antes de cerrar la puerta ella se gira y en su mirada hay un brillo de al menos una semana más, una obscena prórroga. Oigee i destripa el reloj de pared, le sobran piezas, no quiere que termine esa historia pero todo termina y las horas desgarrarán el torbellino del cada vez menos. Una gota de eternidad cae en el abismo de la espera hasta el próximo miércoles.  



12 comentarios :

  1. Simplemente hermoso. Me encanta...todas las palabras, escogidas como piezas únicas de un puzzle.

    Un gran saludo, te sigo, aunque no me haya manifestado antes.

    ResponderEliminar
  2. Leerte antes del desayuno, antes del sol, antes del camino...
    Un beso grande, Pedro

    ResponderEliminar
  3. anais.gc.gn, ahora salgo rápido a trabajar, pero te prometo entrar en tus blogs que me han parecido muy interesantes.
    Gracias y un saludo.

    ResponderEliminar
  4. Antes del sol, qué afortunada.
    Un beso grande, Virgi.

    ResponderEliminar
  5. Gymnopédie nº 1 de Satie, mmmmmmmmmm, bellísima pieza, como tu escrito.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Maria, ¿te la tarareo?, gracias, un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. :-)
    eres tan grande escribiendo...
    gracias, tesoro.

    ResponderEliminar
  8. Mirada, ¿escribiendo? ¿Y esas fabes con almejas que preparo?, ¿y cómo te canto al oído?, ¿y esa atención con la que te escucho en san Andrés de Teixido? Eres una ingrata. ¿y cómo te acuno?, ¿y cómo juego al mus?, etc-
    Un beso, reina de todas las Galicias que en el mundo han sido.

    ResponderEliminar
  9. jajajajajajajajajaja...
    ok, ok, ok
    eres grande en todo :-))
    beso, beso, beso, beso

    ResponderEliminar
  10. Mirada, negativo.
    No te llego ni a la altura del zapato en sinceridad, sensibilidad, bondad, entrega a los demás, honradez, eres una persona extraordinaria y me siento muy honrado y orgulloso de ser tu amigo.
    Y mira que es difícil ser tu amigo porque por si fuera poco eres una mujer tan atractiva que no se cómo no me subo a tus labios y te como entera. Solo la distancia (y tú) lo impiden.
    Jajajajajajaja. Te quiero, belleza.

    ResponderEliminar
  11. Entre la dulzura de tus escritos y la picardia de tus comentarios, sigo saboreando tu talento.

    ResponderEliminar
  12. Elizabeth, ¿te quieres casar conmigo?
    Muchas gracias

    ResponderEliminar

Gracias por venir

Mi foto
Bilbao, Euskadi
pedromg@gmail.com