miércoles, 10 de marzo de 2010

Fieramente quiero quererte


Debió pasar mucho tiempo sin poder estar con ella, sin llegar a darle el heredero de las fortunas. El recuerdo de la pequeña blanca debía de estar allí, tendido, el cuerpo, allí, atravesado en la cama. Durante mucho tiempo debió de ser la soberana de su deseo, la referencia personal a la emoción, a la inmensidad de la ternura, a la sombría y terrible profundidad carnal. Después llegó el día en que eso debió resultar factible. Precisamente aquél en que el deseo de la niña blanca debía de ser tal, insostenible hasta tal extremo que hubiera podido encontrar de nuevo su imagen total como en una fiebre intensa y poderosa, y penetrar a la otra mujer de ese deseo de la pequeña, la niña blanca. A través de la mentira debió encontrarse en el interior de esa mujer y, a través de la mentira, hacer lo que las familias, el Cielo, los antepasados del Norte esperaban de él, a saber, el heredero del apellido. (El amante .-. Marguerite Duras.)


Fieramente quiero quererte, como este que soy, el de ahora, este que te ama, exigente, que te toma entre sus brazos y te lleva a la cueva de nosotros, ocultos y libres, abrigados por capas de tiernas palabras, de silencios que lo dicen todo, de caricias inventadas, de una mirada que nos ata y nos empuja a través del puente suspendido sobre un mar tempestuoso.

Todos gritan que no nos tiremos y tú y yo, mi dulce Wendy, ajenos a los tiburones de abajo y a los de arriba, caminamos torcidos y equilibrados, borrachos por tanto oxígeno que podemos arder, mareados por el movimiento de este buque que cabecea entre las olas inmensas de lo imposible para, al final, dar un brazo por una cama tibia, por una habitación silenciosa y en penumbra, por horas desmenuzándonos como curiosos insectos que todo lo quieren saber, que quieren llegar a cada rincón de nuestros corazones confundidos y hambrientos, inmensos como desiertos, con cabezas saliendo de la tierra en espera de lluvias, de relámpagos, de tantas emociones como nos regalamos entre flores y dibujos de alfombras traicioneras, de la puerta que sella y defiende, del miedo a dejarnos llevar y empezar de nuevo. 

Fieramente quiero quererte, vida, y la realidad me toma de las solapas y me abofetea, me empuja contra la pared, me intimida, me obliga a bailar delante del espejo, me muestra la realidad de este que soy, el de ahora. Y es entonces, justamente entonces, cuando me alejo, cabizbajo, cuando el mar de lo cotidiano me traga, cuando sé que no hay lugar para los sueños. Vuelvo al mundo submarino. Glup.


(Gracias  a Mirada)

12 comentarios :

  1. La Duras fue tan prolífica...
    No se por qué digo fue, cuando ella sigue siendo.
    ¿Quién no ha leído alguna vez el amante?
    Para mi fue el primero de muchos. Después la sorprendí en una serie de artículos que escribió para un periódico francés -pa ganarse la vida no más-y aún así seguía siendo ella, aunque con otro tono.
    Adoro todos los tonos de la Duras, tan dispares, a veces, pero unidos por ese hilo conductor de su cadencia.
    Adoro sus puntos y comas, sus espacios entre cada aliento.
    Una palabra precisa que te acuchilla (lo demás sobra); Todo sobra si es para distraer; y ella no distrae, te adentra.

    Amar con fiereza...Desde luego no puede ser dentro de un sueño, o tal vez si y no nos queda otra.
    Pero en este caso sería desalentador.
    ¿Por qué imposible?
    Porque somos unos gallinas

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  2. Con el título de hoy, seguro que Wendy no puede negarse.
    Te sigue en la inmersión...
    Besos tímidos.

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  3. Hola, Buenas Tardes Pedro

    Nunca se llegará a saber -de la Duras- lo que normalmente se llega a conocer de personajes o personas literarias que saben generar [ y en ocasiones, marketinizar] el interrogante de un supuesto misterio.

    Lo último que me comentaron desde la misma Plaza&Janés, fue decisivo en ello. En lo de usar ese horripilante verbo : marketinizar.

    Pedro, arrójame esa sonrisa de que lees esta incongruencia congruente.

    Un atento y cordial saludo,

    Art Alegoría

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  4. Más que nada a saludar, ver que se sigue escribiendo...

    Fieramente, feroz, por si las "moscas" te envío un acorde de cajita de música discorde, más menos con ínfulas de cajita de Pandora, aunque màs que nada con deje de flautín.

    Espero ciertas condiciones para mantener la frecuencia de lectura y escritura. Anduve buscando una balsa entre tanta tormentosa climatología...

    Veo que mantienes la diaria visita, con placer lo veo.

    Un saludo, Pedro. Y un ¡chuik! de los que ya casi ni me quedaban entre las teclas.

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  5. Unos panes en pompa, entre rojo y amarillo castizo.
    Unos pies de película en un lavabo.
    Una acuarela derramándose.
    Palabras llenas de sueños entre silencios de quiero querer.
    Y como si eso no fuese suficiente para emocionarnos, además depositas un gracias a una lágrima compartida.
    Meu querido amigo, grazas a ti por tu extraordinaria creatividad y por el don de mantenernos pegaditas y pegaditos a tus letras, es que nos gusta leerte.

    Un abrazo enorme cargadito de besos

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  6. Nikté, proliferan los prolíficos.
    Las Duras proliferan menos.
    Y ya no se ama como antes, aquella fiereza, aquel ardor.
    ¿Por qué?
    Vaya usted a saber.
    Ser gallina es fácil, ser gallo es complicado, ser pollo es vulgar, lo mejor es ser otro tipo de animal, incluso racional.
    Pues eso.

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  7. Arantza G., dentro de un orden ser Wendy no está tan mal.
    Un día vuelves del País de nunca Jamás y (generalmente) evolucionas.
    Lo malo es ser Peter Pan.
    Y hay tantos.
    Besos fieros.

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  8. Art_Alegoría, con delicadeza bilbaína dejo sobre una bandeja de plata mi sonrisa, la mejor que tengo hoy (con este frío, qué quieres)

    Con la misma delicadeza, quizás aumentada, te susurro qué, querido, la Duras, su presunta marketinización, Plaza&Janes y todos los coros celestiales, sinceramente, me importan tres pepinos, en este blog vengo a hablar de mi (s) texto (s).

    Tolérame este exceso de testosterona.
    Mi saludo.

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  9. Ah!
    Que quieres que hablemos de tu texto.
    Hijo, eso se avisa, es que pones a la Duras ahí en la cabecera y una se pierde.

    Vale, ahora te leo solo a ti, a ti solito

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  10. Ya tá

    !Cuánta pasión!

    ¿Entonces, pollo no?

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  11. Grrrrr ¡¡¡¡ Pues fieramente te querré¡
    Me quedaré sólo con el título esta vez, pero siempre te leo hasta el final. Conste;)
    Es que soy de las que se lo leen todo, un desastre¡¡¡ Bueno a veces cuando me resulta un rollo me leo el final por eso de si me muero mañana y no me da tiempo, pero es las menos de las veces. Y ya :0))

    Besín.
    P.S. Por cierto, te debo un em@il. Ya llega como esta conga...

    http://www.youtube.com/watch?v=4tbdJBoiepQ

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  12. Menudo mundo raro este. Queremos querer fieramente y no nos atrevemos, mentimos y nos ahogamos en el ahora, porque de realizar el sueño amando donde nunca amamos trascendería en el ahora ahogado.

    ¡Qué gane el quiero la guerra del puedo!
    Y un beso.

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