Qué extraña escena describes y qué extraños prisioneros. Son
iguales a nosotros.
(Platón. República, Libro VII)
Junto a la puerta del Perdón está el albergue de Jato. Un laberinto de piedra y madera. Estoy en un habitáculo, junto a catorce inquietos desconocidos, tumbado en un mínimo catre. Detrás de las paredes llegan voces en italiano, inglés, francés, alemán y otras lenguas que no distingo. Tengo calor, frío, cansancio, hambre, sueño, me duelen las piernas, no puedo dormir. Encogido en el saco en posición fetal me pregunto qué hago aquí. Añoro el Hilton de Berlín y el calor del vientre de quién yo sé.
¡Vaya peregrino! ¡Pecadorrrrrr! Lo de Berlin.... ¿por la Alemanita?
ResponderEliminarun abrazo.
Debe ser una preciosidad. Una requiere más esfuerzo que la otra.
ResponderEliminarY una buena experienza echar de menos a quién tú sabes.
Un beso.
conozco a gente de Villafranca del Bierzo, es mas, estuve ahí hace un año... disfrútalo!
ResponderEliminarBesicos
Caminito de Santiago...a ganarse el Jubileo.
ResponderEliminarYo era una adolescente cuando llegué a Santiago y también me dolían las piernas y los pies, mucho!
Besos de domingo.
Debes estar disfrutando mucho ese viaje... Sabes, ese Director de 60 años cumplió hace poco 61...
ResponderEliminarHas conocido a unos de los catorce inquietos desconocidos? Y en qué idioma hablaron?
Saludos desde Amsterdam
Poeta De cenizas...
ResponderEliminar¡Ay!
Un abrazo.
Durante esa experiencia, mi querida gaia07, quién tú sabes estaba en el camastro de al lado.(y qué mal lo pasó, pobrecita)
¡ay!
jajajajajajajaja
Besos.
Belén, hay buena gente allí, sí.
Y no se come mal, al contrario.
Lo disfruté.
Espero volver.
Besicos
Arantza G. sin júbilo, con seriedad, te digo que soy agnóstico.
Mi(s) viaje(s) fue espiritual pero no religioso. Sobre todo el segundo.
Yo también era adolescente ese verano, de hecho sigo siéndolo.
Aunque el espejo se empeñe en contradecirme
Besos de lunes.
giovanni
, disfruté en el viaje. Ahora disfruto recordando partes de él.
Felicidades al Director.
No conocí a ninguno, eran ruidosos y maleducados.
Salí de allí en cuanto pude.
Para colmo me perdí en la oscuridad.
Saludos bilbaínos.
De lo que una se entera cuando ya todos han...dejado su huella :P
ResponderEliminarBikiños y salgo de puntillas.
Tienes dos opciones, Mayte, creértelo todo o no creerte nada.
ResponderEliminarTe recomiendo la tercera.
Besos.