domingo, 2 de diciembre de 2007

Ventana

Permanecer en la inquietud, no quiero ser sorprendida. Apaciento mi sombra en los lugares más inseguros del pensamiento. Oigo crecer mi osamenta cada día, mi infancia no ha terminado. (Julia Otxoa)



Esta ventana con vistas a una pared de ladrillos rojos, donde alguien mira ensimismado la triste longitud del aburrimiento, donde el silencio es una parte más del acertijo de encontrar nada, de preguntas colgadas del limonero que ha crecido en el patio, gatos erráticos, ancianas vecinas sentadas en el porche esperando la muerte o quizás el desayuno que les traerá una sobrina, pálidas botellas con agua de lluvia, una lámpara encendida que alguien se olvidó de apagar, por encima el cielo gris, por encima la soledad, sólida, imperativa, por encima el hastío de que pasen rápidos estos tres días hasta que él se vaya y ese alguien se quede aún más sola, aún más confundida. Si esto es posible.

Bien, dicho esto me pregunto de dónde saldrá el aire que se volverá viento, este desolador paisaje de soledades, pobres seres solos, anhelos perdidos en ese viento que era aire, que no era nada, que se espesa a partir del susurro de un bosque donde no entra la luz y me divertía más leyendo sus escritos sobre nuestros encuentros eróticos en el cuarto donde la luz nos cegaba.

Pero llamo y no está, llamo y la voz choca contra una pared de ladrillos rojos donde alguien mira ensimismado, etc. Cada día me resulta más trabajoso llenar el vacío nuestro de cada día dánosle hoy. Y no por falta de iniciativa, no. Tampoco por falta de deseos. Quizás por un principio matemático, menos es más, o desilusión, o cansancio de decir ruido y que nadie escuche.

Vale, vale, lo sé, ya me pongo en orden, dentro de tres días se va a Londres con su mujer y sus hijos. Cuando vuelva lo pienso.



14 comentarios :

  1. Los que hemos hecho de la inquietud un permanencia te entendemos a la perfección.
    Nos asomamos a ventanas sin horizontes.
    Y es que tres días dan para muy poco.

    Abrazos

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  2. Algo haremos ybris, algo haremos.
    Cualquier cosa menos estar asomados a esta ventana. O a otras.
    Y el horizonte...lo buscaremos.
    Abrazo

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  3. Buscar.. buscar... buscar...
    ¿por qué con horizonte?
    ¿No es mejor mirar, sentir, lo que tienes a tu ladito? ¿lo que tienes dentro de ti? ¿no lo dice un dicho?
    Bueno es igual, no me sale ese dicho, ahora....
    Obviamente no sé lo que es mejor en cada momento para ti, claro. Lo sabes tu mucho mejor. Como cada uno de nosotros y nosotras.
    Te quiero mucho, disfruta siempre. Miles de besos

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  4. Pero a mi me parece que vos sos una de esas personas que son capaces de ver más allá de la pared de ladrilos rojos, como quien sabe que ahí no se termina el mundo, sólo se detiene a la espera de que trepemos la pared y sigamos camino.

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  5. Mirada
    Tú sabes.
    En este texto he mezclado una ventana a la que me asomaba (y daba a una triste pared de ladrillos rojos. Todo un símbolo, era un límite, algo que traspasar, que romper), un viaje, una espera, un cambio de identidad para que no se sepa y mi habitual llamada a alguien que no.
    Ah, sí, traspasé la pared (para eso hizo falta una inundación, dos muertes, mucho dolor y bastante alegría. Vivir)
    Te agradezco tanto, tanto, tu presencia.(aquí dentro)
    Besos.

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  6. Ah, claro, Arcángel Mirón, veía más allá de la pared de ladrillos rojos, no a través de ella, no, daba la vuelta a la manzana y veía el otro lado. “Ahí quiero llegar” –pensaba-.
    Me llevó un tiempo.
    Llegué.
    Ahora pienso que necesito otra pared que traspasar.
    O mejorar mi capacidad de trepar.
    De montañas ya ni hablamos.
    De saludos, sí, hola.

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  7. Chico, me has robado una de mis pinturas preferidas, el balcónd e la celestina...y me siguen encantando tus textos

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  8. Ogigia, solo lo tomé prestado.
    Gracias por seguir por aquí.

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  9. Y se asomaba aquella ventana. Los demás decían ver un muro de ladrillos rojos pero ella veía submarinos, viajes en globo,principitos enamorados de una rosa,brujas malvadas, enanos de aihooo,zapatitos de cristal, lobos cazados y caperuzas rojas.
    Efectivamente,tan solo debía mantener la mirada en aquel muro de ladrillos rojos para escapar a los mil cuentos.

    Muacksessssss

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  10. Estas paredes que nos devuelven desprecio...el mismo del que la embadurnamos, eso si.

    La soledad, el hastío, muy caprichoso todo junto, ahora te jodo, ahora no, lo que me recuerda...las lentejas, que no se peguen! (tienen una leche...)
    Y en esto que buscamos, si no lo hacemos nos sentimos fracasados, pero si lo hacemos...¿será lo correcto? ¿es lo que quiero realmente? ¿me estaré equivocando? ¿naranjo o amarillo? ¿con perejil o cilantro?

    Me pido curry, es más divertido. Así que mi beso va a ser picante...jejeje

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  11. Nikté, me parece que estabas asomada a la televisión.
    Además a una de pantalla muy grande.
    Besazos.

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  12. Maduixeta si le doy alguna vuelta quizás lo entienda, pero me acabo de levantar de la cama y mi capacidad de comprensión está aún muy disminuida (luego no estará mejor).
    En cualquier caso también me pido curry.

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  13. Ya decía yo...que esto que me pasaba era mu raro.
    Enttonces quedamos que era una tele, no?
    De plama?
    En fun
    Juas juas
    Besotes, machote
    Esto es porque rima, na mas
    Muacks

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  14. Emperatriz Nikté, en estos tiempos femeninos en los que ser macho parece a veces ser un pecado, reivindico mi condición de macho, es más, de machote, sí. (pelo en pecho incluido).
    Respeto todas las opciones (menos las de la hija esa de Isabel Presley ¡que horror!) y me parece muy bien, cada uno será lo que sea, nada importa su vida anterior.
    En cambio, ya ves tú, para los besos soy todo dulzura.
    (como en la elección de melones, se permite cata y cala)
    Eso.

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