jueves, 6 de diciembre de 2007

Casa deshabitada.


Casa deshabitada.
Ecos perdidos bajo los armarios.
Danza de soledad por los pasillos.
Lentitud de ausencia en la cocina.
Manchas frías en las paredes desnudas.
Una niebla de amor roto sobre las camas.
Dolor que lucha en la calma de los cuartos.
Sin risas de niños detrás de las cortinas.
Ni viejos sentados en el balcón.
Se ha perdido la dicha de las sombras.
No hay vestigio de nadie.
Nada.
Se ha caído la esquela del portal.


10 comentarios :

  1. A veces me siento así cuando no hay nadie en casa y estoy yo solo. Pero otras veces me he relajado tanto con mucho silencio, la noche negra como onix, la luz de la luna penetrando por alguna de mis ventanas, y la oscuridad total. Siento que no hay nadie, aunque esté yo.

    Saludotes y abrazotes

    Sweet Dreams, de todo Corazón:
    Arthur

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  2. Uy, una casa deshabitada, podés jugar a las escondidas ahí y ese puede ser tu escondite y podés ganar porque nadie te encontrará, jiji!

    Y ya viste si es de alguien? porque si no, entonces podés comprarla.

    Saludos y abrazos

    Nice Day, con toda mi Alma:
    Gusthav

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  3. Verdaderamente desolador.
    Hasta la esquela del portal se ha caído.
    Menos mal que no se ha quedado un gato solo dentro como en el poema de W. Szymborska.
    Excelente poema.

    Un abrazo.

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  4. Arthur, tienes varias faltas de asistencia, como sigas así no aprobarás el curso Glup.
    Tu comentario, como últimamente, desconcertante.
    Saludos

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  5. Lo mismo te digo Gusthav, no aprobarás.
    Y tu contrapunto me place.
    Saludos.

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  6. ybris, me parece un poema muy flojo, pero no me voy a cortar las venas por ello. Mañana me saldrá mejor.
    Ahora me voy a Atapuerca.
    Abrazos.

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  7. Que desolación .
    Casi todas las casas deshabitadas vuelven a habitarse otra vez ¿verdad ?
    Un abrazo

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  8. Quizás Churra, pero la mayoría de las veces no por las mismas personas.
    Es lo que tiene morirse.

    Viven los vivos.
    El resto es recuerdo.

    Uy, lo que me ha salido (estoy alegre, pero me ha salido así de triste).
    Abrazos.

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  9. Tan vacía... Tanto, que no hace ni tan siquiera frío. Son casas extrañas éstas, las que están vacías, a las que, de repente, les falta una habitación, las mismas que emigrancuando algo va mal...

    Saludos sónicos

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  10. No te he pillado sergisonic ¿Habitaciones emigrantes? ¿qué has tomado? El surrealismo al comentario, el frío en las orejas, la lluvia o la niebla, difícil elección. Llovía hace un año en París y en el Marais es extraña la comida. Saludos con la nariz

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