jueves, 21 de enero de 2021

Byung Chul Han


“El terror de lo igual alcanza hoy a todos los ámbitos vitales. Viajamos por todas partes sin tener ninguna experiencia. Uno se entera de todo sin adquirir ningún conocimiento. Se ansían vivencias y estímulos con los que, sin embargo, uno se queda siempre igual a sí mismo. Uno acumula amigos y seguidores sin experimentar jamás el encuentro con alguien distinto. Los medios sociales representan un grado nulo de lo social.


La interconexión digital total y la comunicación total no facilitan el encuentro con otros. Más bien sirven para encontrar personas iguales y que piensan igual, haciéndonos pasar de largo ante los desconocidos y quienes son distintos, y se encargan de que nuestro horizonte de experiencias se vuelva cada vez más estrecho. No enredan en un inacabable bucle del yo y, en último término, nos llevan a una "autopropaganda que nos adoctrina con nuestras propias nociones".”


― Byung-Chul Han, La expulsión de lo distinto

Hoy ya no vivimos poéticamente en la tierra. Nos acondicionamos en la zona digital, donde nos sentimos a gusto. Somos cualquier otra cosa que anónimos u olvidados de nosotros mismos.

La red digital habitada por el ego ha perdido por completo todo lo ajeno, todo lo inhóspito. El orden digital no es poético. Dentro de él nos movemos en el espacio numérico de lo igual.

 

- Byung Chul Han, La expulsión de lo distinto. 

(Editorial Herder, Barcelona 2017)


10 comments :

Tracy dijo...

Estoy de acuerdo con lo que se dice en los textos que nos muestras, pero qué sería de nosotrxs , si en esta época de pandemia no tuviéramos esa plataforma de amigos on line que nos hace olvidar lo que existe fuera, que es la nada?
Las amistades siempre se eligen por afinidad ya sean física o digitalmente, pienso yo.
Un abrazo digital, que de los otros no se puede.

Pedro M. Martínez dijo...

Tracy, Byung-Chul Han dice muchas cosas, algunas las entiendo:
.
“La transparencia y la hipercomunicación nos despojan de toda intimidad protectora. Es más, renunciamos voluntariamente a ella y nos exponemos a redes digitales que nos penetran, nos dilucidan y nos perforan. (...) En el infierno transparente de los igual no falta el miedo. Lo amedrentador es, justamente, esa embriaguez que cause lo igual y que se vuelve cada vez más intensa.”
.
Estamos en un tiempo tan difícil que tenemos que buscar afectos en el aire. Terminaremos todos p´allá.
Abrazos

Moony-A media luz dijo...

Bueno, es lógico que busquemos amigos en el aire, no podemos salir de donde vivimos, pero, eso del ego no lo tengo yo muy claro.
Además, alguna vez nos tomaremos un café. A que si?
Y todo será normal, sin espacios virtuales ni igualdades absurdas.
Somos distintos y, hasta por aquí, lo sabemos.
Un beso de noche.

Pedro M. Martínez dijo...

Moony-A media luz me doy cuenta que estoy entrando en un territorio de mi cabeza que no conozco y me sorprende porque hasta marzo pensaba que lo tenía todo bastante en orden (hasta el desorden). Supongo que le pasará a muchas personas.
Claro que somos distintos, todos, por fortuna. A veces se producen afinidades en el aire que cuando se llevan al mundo real se convierten en amistades profundas y verdaderas (al menos a mí me ha ocurrido varias veces).
Lo de tomar un café sería una maravilla pero entre que mañana cierran los bares y posiblemente nos “perimetren” tendremos que dejarlo apara agosto (+ o -)
Besos para tu insomnio.

Moony-A media luz dijo...

O para octubre, si nos vacunan, o diciembre o para 2023.

Luz dijo...

Vaya, es fascinante lo que has puesto. Será porque personalmente estoy harta de los grandes valores atribuidos a la comunicación digital, que es útil para muchas cosas pero para reemplazar la vida conectada a una realidad tan rica y compararla a otra realidad más pobre. No sé yo.
"habitada por el ego ha perdido por completo todo lo ajeno" dice tu Byung-Chul Han y ahí es donde debería intervenir el afuera y oxigenarnos con otros, sobre todo ahora en que la mayor actividad está adentro y el afuera cada vez más libre.
Lo digital, admisible y necesario para mí como complemento.
Pero como dices todos somos diferentes y eso es riqueza, que lo digital no vaya a alienarnos más todavía y terminemos como robots de verdad o sea digitales.
Que tengas una mañana a tu gusto.
(Yo soy búho.)

Devoradora de libros dijo...

Creo que hay una edad y una época para cada cosa: una para querer ser como los demás y así «encajar» y otra para valorar y disfrutar del hecho de ser diferente al resto, único y especial.
Lo digital puede ser como todo, bueno o malo, todo depende del uso que hagamos de ello.

Besos.

Pedro M. Martínez dijo...

Moony-A media luz, es igual la fecha. Yo, un cortado sin azúcar. Que sea pronto para que no se enfríe.

Pedro M. Martínez dijo...

Luz, tengo tal cantidad de información, de estímulos, de noticias, de lo de fuera, que lo de dentro se me está encogiendo, estoy volviendo a una posición fetal (eso sí, sin chuparme el dedo pulgar). Iba a decir que no entiendo nada pero en realidad entiendo bastante, sobre todo que estamos en un momento trascendental de supervivencia y que al que Dios se la de san Pedro se la bendiga. Yo qué sé. (Yo soy un gnomo)

Pedro M. Martínez dijo...

Devoradora de libros tu primera fase es bíblica, la segunda es sabia y la tercera, lógica. Los besos, muy ricos. Van los míos.

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