martes, 31 de julio de 2018

Jeanne Dielman.


Ya nunca vendrá el frío
a llenarnos el pozo de zarzamora verde.
Ni volverá tu boca a dejar en la mía el sabor de la almendra.

(Elsa López)



Jeanne Dielman vive en el 23 Quai du Commerce, 1080 Bruxelles. 
No tengo la menor idea de quién es.
¿Conocen ustedes a Jeanne Dielman?





Paso de 12 a 11 y la letra cambia, parece que escribe otro. Vuelvo a cualquier día desde hace tanto y sí, escribe otro, no reconozco esas historias, lo inventado. Raspo los textos hasta quedarme con la esencia, lo mínimo, el dibujo presenta a un hombre atormentado que escribe para huir de sí mismo. Parker dormita.

lunes, 30 de julio de 2018

William T. Vollmann

Ella le sonrió. Entonces, se volvió lentamente para recibir más felicitaciones de elitistas y militaristas, de aquellos que habían matado a Peter, y no solo a Peter, sino a todos los jóvenes equipados con cascos que, con el rostro pálido, avanzaron penosamente por trincheras en zigzag y atravesaron parajes infernales, caían doce de golpe, los jóvenes de piel ahumada con dagas que se arrastraban por túneles para matarse unos a otros, los jóvenes valientes que se precipitaban contra alambradas, fueron empalados y ahorcados ahí mismo hasta que el viento-bala los atravesó; o si tenían suerte pasaban a ser prisioneros bizqueantes, obligados a marchar entre líneas de franceses a caballo; entonces podían albergar esperanzas de volver a casa años más tarde, amargados, pobres y llenos de odio, listos para la siguiente guerra.  


Vollmann, William T. “Europa Central.”



¿Conocen ustedes a William T. Vollmann?



Estoy sumergido en la Europa central de William T. Vollmann, literatura pura, difícil, uno de esos libros interminables para degustar sin prisa, paladeando cada línea. En las primeras páginas cita a Lisca Malbran, corro a google y obtengo apenas una pequeña fotografía y su participación en varias películas al final de la segunda guerra mundial. Desecho el dato y espero la llegada de Fanya Kaplán, un capítulo después. (Y así)



Lisca Malbrán nació el 17 de octubre de 1925 en Berlín, Alemania, Marlis Carmen Hoffman. Era una actriz, conocida por Junge Herzen (1944), Das war mein Leben (1944) y Heidesommer (1945). Murió el 6 de junio de 1946 en Copenhague, Dinamarca.
En la novela épica de William T. Vollman "Europa Central" (ganador del Premio Nacional de Literatura 2005), se menciona con frecuencia como una de las favoritas de los soldados alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.


¿Conocían ustedes a Lisca Malbran?




Mi nombre es Fanya Kaplán. Hoy disparé a Lenin. Lo hice con mis propios medios. No diré quién me proporcionó la pistola. No daré ningún detalle. Tomé la decisión de matar a Lenin hace ya mucho tiempo. Lo considero un traidor a la Revolución. Estuve exiliada en Akatúy por participar en el intento de asesinato de un funcionario zarista en Kiev. Permanecí once años en régimen de trabajos forzados. Tras la Revolución fui liberada. Aprobé la Asamblea Constituyente y sigo apoyándola

¿Conocían ustedes a Fanya Kaplán?

domingo, 29 de julio de 2018

Muletas




En un semáforo.

“Crack, algo se ha roto pero te entiendo,  vaya si te entiendo, eres una mujer del siglo XX viviendo en el XXI, se han caído las hojas del calendario que tenías en la cocina y solo sabes que este es tu año y dibujas los límites del sí y el no, del ya veremos.

Se rompen las normas y ya no me importa quién lee, qué entiende. Solo sé que te miro y te veo bella. No eres la niña que conocí hace quince años, eres una mujer nueva y eso es mucho, demasiado, me desborda, tanto que me has pellizcado desde un extremo del corazón y ahí me tienes, amigo, admirador exclusivo, el que te llama, el que te habla, el que ha despertado de algunos sueños, el que te ha abierto puertas a ti misma.

A veces me asustas, te has hecho dura, egoísta, tajante, fría, inaccesible. Lo peor es que entiendo que no me aproveches, que creas que todo es para siempre. Nada es para siempre, todo tiene un tiempo.

Desde el accidente soy un gallo desplumado, un duro de corazón blando, un hombre que ha aprendido a llorar, que llora, que a veces necesita algo más que silencio o miedo. No soy el que era, han pasado los años. ¿Qué debo hacer para que me creas? No sé qué puedo hacer para que me veas. No sé lo que digo, pienso demasiado tiempo en ti, no me conviene, estás dentro, aquí dentro. No sé cómo no entiendes que necesito tu ternura. No sé.”

-Perdone ¿decía algo? ¿Quiere que le ayude a cruzar?¿Se encuentra bien?

-No, no, disculpe, hablo solo, ya me arreglo. Gracias.

Y camina en dos muletas.

sábado, 28 de julio de 2018

Incendiario



Cuando trataba con alienistas y gentes de igual condición, definieron en sesudo conciliábulo mi estado mental (¿?). De forma precisa. No recuerdo la expresión exacta. Es decir que, más o menos, era normal. En términos coloquiales, para entendernos, venían a decir, a grandes rasgos, sin matizar, que vivía la vida como espectador, la veía desde un lugar que estaba fuera del escenario. No es grave, decían, hay cientos como usted.

No me encuentro hoy en perfectas condiciones. Quizás no sepa expresarlo bien. Tengo la lengua de la mente hecha un lío, un nudo, me trabuco, me encocoro, me confundo, me me. Quiero decir bajo y oscuro, que hoy no es que vea la vida como espectador, no, es que quiero matar a los espectadores (imaginarios), dar fuego al escenario (imaginario), al teatro, a la ciudad entera y quiero ver arder todo desde un monte cercano.

Después me iré a la playa a pasear desnudo mientras hablo con las gaviotas justo antes de entrar en el agua fría que me purifique. O así. Qué cosas
(Si quieres ver fotos te vas a http://glup3.tumblr.com/)


viernes, 27 de julio de 2018

Y así.


Poema del escaparate. A buenas horas, de acá para allá, sin poder dar de comer a la urraca, sin entrar en garitos de berlanga, sin poder explicarme, hoy tampoco, mi querencia por lo del falansterio. Y así.

jueves, 26 de julio de 2018

Técnica


Esta es una incierta técnica de luces rojas de aviso y constancia, escalofríos de un niño que aún sueña con aquel escenario de tambores y plumas, pieles rojas ciertos, caras pintadas con colores de guerra, desde el sexo presentido en sueños pueriles hasta la muerte sentada en un sillón y visitándonos por riguroso turno, como en las charcuterías. Tengo el número siete. 

miércoles, 25 de julio de 2018

Contraste


Untitled, Photo by Louis Lanzano, 1973

Bilbao es una ciudad con árboles y personas amables.
Salgo por la autopista, coches y coches, camiones y el bosque verde, los montes verdes, sol, todo reluce y brilla, el verano llena el aire.
Antes el mundo era grande, inabarcable, todo estaba lejos o no estaba. Ahora ahí es un aquí un poquito más lejos y tú y yo estamos en un ahora que nadie sabe cómo ha sido, el mundo es esta nada que abarcamos en un plis plas, dos aviones y esperas en aeropuertos con policías malhumorados y desconfianza. Ya ves, por contraste ahí es invierno, llueve y tienes frío, qué cosas, de haberlo sabido. Ahí. Eso.

martes, 24 de julio de 2018

Animoso



Te cuento hoy para dentro de unos días, por si no puedo.

Mi corazón recorre distancias para las que no está preparado y lo más difícil es transitar sin heridas, sin que se caigan las hojas de este libro libre con fotos degolladas y alambradas para que la rutina no salte por la ventana con cortinas de encaje y canciones de cuna en el ático, caballos sin alma y la búsqueda del verso entre atropelladas voces que ahora sangran, ahora cantan o se adormecen y los días se deslizan fáciles o complicados, van en esta crisis que no ha terminado (¡no!) en los que unos pocos se siguen llenando los bolsillos y casi todos temblamos de incertidumbre por noticias amargas, por oráculos pagados, por curas mudos, por la espada del paro, porque creíamos que la risa era el estado natural, la felicidad, y no, esta fecunda tristeza es una planta que trepa y nos lleva al apocalipsis. O así.

Creo que no era esto tan pesimista lo que quería decir te/ros. Mientras lo escribía, por detrás, a la vez, he imaginado una historia de amor otoñal pero entre ir y venir no recuerdo si se me ha olvidado o si la escribiré mañana. Veremos. Va. Ánimo.

lunes, 23 de julio de 2018

Este Parker...




Parker sabe que durante su vida, algunos hombres piensan obsesivamente en el sexo, también en otras cosas, pero menos. Al llegar a cierta edad, recuerdan que han de morir y se dedican obsesivamente al deporte, al rock, a cosas de jóvenes, pero el tiempo pasa y no hay nada que lo pare. 
De lo que piensan las mujeres Parker apenas es capaz de intuirlo.

domingo, 22 de julio de 2018

Adam



Solo en la belleza creada
por otros hay consuelo.

(Adam Zagajewski)

Era lunes. El primer muerto que vio P. estaba abrazado al volante del camión, empotrado contra un árbol en una curva traidora. Las vacas que transportaba vagaban desorientadas por la carretera y los prados de alrededor.
El martes P. se incorporó al ejército.
En los siguientes meses vio muchos más muertos.
.
Contar el principio de esta historia, aquí, supone que aunque a nadie le importe, a mi me deja la sensación de haber removido las aguas de lo que pasó y de lo que pudo haber pasado, un coitus interruptus que hace que me sienta frustrado.
Pero seguiré con ella.

sábado, 21 de julio de 2018

Napoleón



¿Ves?, es tiempo de dolor, estoy sentado en un cuarto de hospital, a mi lado dormita la anciana  colgada del débil lazo del suero con quién sabe qué antibióticos y fármacos, el páncreas roto, su final, lento, hora a hora,  se despierta y a veces me mira sin saber quién soy, aún puede hablar, no le entiendo, de norte a sur, por un pasillo de luz camina una dama de negros ropajes.

Puedo juntar la emoción del dije, digo, sigo diciendo, solo para que sepas que estoy, sacando tiempo del sueño, saltar de línea a línea sin perder el temblor del alma ni los modales, comer la flor de loto, desmayarme, cambia el viento y la lluvia disipará el calor de estos días.

¿Tienes suerte?, preguntaba Napoleón a sus oficiales. El sí determinaba su siguiente ascenso. Tengo suerte, entro en el bosque de lo ficticio y camino entre los árboles de los días. No soy escritor, utilizo este medio para decir lo que me digo. Estoy diciéndome y no me entiendo.

viernes, 20 de julio de 2018

Peces



Hoy quiero peces, por eso aquí estamos/estoy, jugando las bazas contra el tahúr del tiempo, ganando días, saltando a Fosbury sobre la soledad, inventando un ahora de techos altos y gemidos en pijama. Ya no (me) importa la ignorancia vestida de largo que camina por el pasillo, qué más da, pasen y vean, este es un espectáculo gratuito, un cantar de ciego, una perorata sobre el acantilado indiferente y sin embargo se mueve. Creo, aunque quizás sea solo un tic.

jueves, 19 de julio de 2018

Russ

Gina Trikonis and Russ Tamblyn in West Side Story directed by Jerome Robbins and Robert Wise, 1961

La cosa va así, esto es un juego en el que se trata de imaginar. Para ello utilizo una carta a una mujer que parece despistada pero que se fija en aquello que le interesa, que clava en el texto sus ojos tan bellos y ve lo que ve y más allá, detrás. Y dice/digo (en la carta. Please Mr. Postman).

Uno. Imagina que vas caminando con tus piernas tan largas, tan bonitas y yo soy un desconocido. Nos cruzamos por la calle. Por supuesto ni me miras, no reparas en mí. Yo sí reparo en ti, por supuesto. Qué señora- pienso. En cuanto pasas me doy la vuelta (para mirarte el culo, claro). Me subyuga tu caminar y sigo tus pasos (sin perder de vista el movimiento de tu culo). Esos pantalones son de chico- pienso - pero le sientan bien. Varios kilómetros después, siguiendo tus contoneos, entras en un Audi nuevo y te marchas. Me quedo en la acera. Vaya mujer – pienso, mientras me rasco la cabeza. No pasa nada, tú ni te has enterado, pero quédate con el detalle.

Dos. Imagina más. Sorpresa, nos encontramos después de un montón de años pensándonos desde una y otra parte del mundo. Un día, por la circunstancia que sea, nos vemos, tomamos un café, un zumo de tomate, algo, nos hablamos. Sin quererlo, se abre una puerta que había estado cerrada. Esa puerta da a una habitación. Como está a oscuras tú no sabes lo que hay dentro. Como yo he soñado muchas veces que estaba dentro, contigo, pues sí lo sé. Por eso, mientras James Taylor canta en OHio, te doy un beso de record Guinness (por lo largo)  e insisto en un recorrido por zonas de tu cuerpo que estaban dormidas como princesas que comieron manzanas embrujadas. No hay nada que hacer. Tomamos más café. No había pastas de té en el supermercado, lo siento ¿te apetece otra cosa?– dices. Sí, tú –digo, pero cambia el aire y la puerta se cierra con estrépito. Me subo al coche viejo y vuelvo a California. Tú te quedas tan feliz, como estabas.
Seguirá mañana. Lo de hoy no es gran cosa, lo sé, pero tiene el condicionante de la mordaza de mi error, contar que en este rincón cuento.



Y me corto.
Esto no es un cuento ni se le parece.
Pero lo intentaré, mañana.
Mas.

miércoles, 18 de julio de 2018

Noche voluptuosa.


“En la Cour du Comerces se hizo la primera prueba de la guillotina, sobre corderos”. ( Lefeuve. Les anciennes maisons de Paris, IV, p. 148. Cit. en Obra de los pasajes, A 1 a, 6) y “Cada época no sólo sueña la siguiente, sino que soñadoramente apremia su despertar. Lleva en sí misma su final y lo despliega —según Hegel— con argucia” (Walter Benjamin; París capital del siglo XIX). Añade: El hombre pasa a través de bosques de símbolos, que lo observan con miradas familiares”. (Baudelaire) puedo perderme en 1102 páginas y contar hasta aburrir os/me pero seré benévolo por el bien de vuestras futuras visitas, siempre inciertas, siempre sujetas al azar google, fotografías insinuantes y música que ya solo suena a voluntad del visitante, flaneur (flaneur: el viajero contemplador y reflexivo que disfruta a su manera del paisaje, el sujeto que erra lentamente por las calles, que se entrega ociosa, imaginativamente, sin un plan prefijado, a lo que le ofrece el destino.)  por avenidas y bulevares d´este blog, de los otros, me refiero a los míos, comprobar que sé de qué no hablo/escribo, ay antes, cuando amaba… dejaba esto perdido de lamentos y no, no, no, que lo mismo me da un telele y no puedo contaros lo de Gotti (John Joseph Gotti, Jr (27 de octubre de 1940 - 10 de junio de 2002), también conocido como The Dapper Don) que quizás no te importe ná de ná, pero ¿qué quieres?, estas páginas en blanco (ya no), dan para mucho y espera que no me salte a Haussmann (Georges-Eugène Barón Haussmann (París, 27 de marzo de 1809 – París, 11 de enero de 1891) fue un funcionario público, diputado y senador francés que trabajó en la ambiciosa renovación de París.) y es que el saber no ocupa lugar que no sé cómo podíamos vivir sin internet o sin electricidad o sin amor o sin gin tonic (la ginebra, Hendricks) con unas gotas de limón exprimido y mucho cariño del barman o barwoman, hasta aquí que me espera el Casco Viejo con su calle del Perro, la de Santa María (ruega por nosotros) o Barrencalle Barrena, con amigos/as tan majos que dan ganas de hablar de ángeles o de cavernícolas, de mayo del 68 o del 69 que también tiene su público, dado que follar en Euskadi no es pecado sino milagro, nos limitaremos a tomar unos vinos, cuatro y a dormir (cada una/o en su cama). Así.

(Para saber + click en las palabras en rojo)

martes, 17 de julio de 2018

Kaufman dice



Kaufman dice: La expresión creativa es la expresión de uno mismo.
La creatividad no es otra cosa que la expresión individual de tus necesidades, de tus deseos y de tu naturaleza única.

Allí y  aquí tratando de justificar esto, lo otro y lo de más allá, el complejo de que la voz no sea la adecuada porque entonces, ¿cuál  es?
Puede ser buscar los recovecos, los pliegues, lo que no se ve, no invisible, no, escondido bajo las piedras de la ceguera voluntaria o fingida, de párpados como persianas, de dedos que tantean el aire de lo nuevo.
Todo esto o lo contrario.
Ya empezamos, así no hay quién entienda nada.
Pues eso.
Por cierto, quién coño es Kaufman.

lunes, 16 de julio de 2018

Daltonismo




Queda claro, esta es una página para que usted venga y lea, ¿ve?

Le propongo un ejercicio, sencillo, ¿sí?

Tápese un ojo con la mano, es igual, el derecho o el izquierdo (los dos a la vez, no) y con el otro, abierto, lea, ¿ve?

Si ha dicho , perfecto.

Si ha dicho NO, perfecto.

Ahora tápese con la mano el otro ojo y abra bien el libre de obstáculos y manos, ¿ve?

No se distraiga, atento, otra vez, ¿ve?

Si ha dicho SÍ, NO, si no ha dicho nada, perfecto.

¿Ve?, esta es una página de literatura para que usted vea.

Si la encuentra, o un mínimo porcentaje de poesía, qué sé yo, si se encuentra una víscera  entre la música o las fotos de otros, sangre, unas tijeras, tranquilo, todo está en orden, me suelo cortar las venas, no me gusta llevarlas largas, no entiendo el silencio como alternativa, soy capaz de pintar de amarillo este blog glup y si es daltónico, entonces, usted no verá ¿ve?

Todo está en orden, es lunes, que tenga/mos un buen día. Amén




El daltonismo es un defecto genético que ocasiona dificultad para distinguir los colores. La palabra daltonismo proviene del físico y matemático John Dalton que padecía este trastorno. El grado de afectación es muy variable y oscila entre la falta de capacidad para discernir cualquier color (acromatopsia) y un ligero grado de dificultad para distinguir algunos matices de rojo y verde. A pesar de que la sociedad en general considera que el daltonismo pasa inadvertido en la vida diaria, supone un problema para los afectados en ámbitos tan diversos como: valorar el estado de frescura de determinados alimentos, identificar códigos de colores de planos, elegir determinadas profesiones para las que es preciso superar un reconocimiento médico que implica identificar correctamente los colores (militar de carrera, piloto, capitán de marina mercante, policía, etc.). Puede detectarse mediante test visuales específicos como las Cartas de Ishihara.
El defecto genético es hereditario y se transmite generalmente por un alelo recesivo ligado al cromosoma X. Si un varón hereda un cromosoma X con esta deficiencia será daltónico. En cambio en el caso de las mujeres, que poseen dos cromosomas X, sólo serán daltónicas si sus dos cromosomas X tienen la deficiencia. Por ello el daltonismo afecta aproximadamente al 1.5% de los hombres y solo al 0,5% de las mujeres.
El término discromatopsia se utiliza en medicina también para describir la dificultad en la percepción de los colores, pero tiene un significado más general. La discromatopsia puede ser de origen genético, en cuyo caso se denomina discromatopsia congénita o daltonismo. También pueden producirse discromatopsias que no son de origen genético y se presentan en algunas enfermedades de la retina o el nervio óptico
¿Ve usted el número que está dentro del círculo?
Perdón, ¿ve usted el círculo?
¿Sí?
¿Y el número?
¿No?


La ceguera es una discapacidad física que consiste en la pérdida total o parcial del sentido de la vista. Existen varios tipos de ceguera parcial dependiendo del grado y tipo de pérdida de visión, como la visión reducida, el escotoma, la ceguera parcial (de un ojo) o el daltonismo.

Mi foto
Bilbao, Euskadi
pedromg@gmail.com

Creative Commons License Page copy protected against web site content infringement by Copyscape ecoestadistica.com site statistics

Vistas de página en total

Lo que hay.(Desde 08.02.07)

Se quedaron

Así vamos

Aquí desde 08.02.2007

(Antes en Blogia desde 07.2004)

(Y mucho antes en "La tertulia en Mizar")

6.741 entradas